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viernes, 11 de julio de 2014

Ana Pie en España y el embajador aquí en chercha


En Barahona, en la corte presidencial
Ana Pie fue una dominicana que falleció en La Coruña, España, su cadáver tiene un mes en un refrigerador porque las autoridades del Ministerio de Relaciones Exteriores y la embajada dominicana en esa nación no han cumplido con su responsabilidad de devolverla a a su patria para ser enterrada. 

Mientras tanto, nuestro flamante embajador en España con asiento en República Dominicana se encontraba inaugurando 14 escuelas en Barahona luego de salir de uno de sus programas de televisión, puede verlo aplaudiendo al mandatario satisfecho de sus logros políticos y del poder que ostenta. Son incontables las veces que este pueblo le ha pedido al presidente Danilo Medina que resuelva el problema del servicio diplomático de la República Dominicana, parece ser que el Presidente está satisfecho con este espectáculo de clientelismo político, vagancia, ineficiencia y lambonismo profesional.

Luis Del Monte / DLRD

Reportaje Diario Libre

   Ana Pie, dominicana fallecida hace un mes en La Coruña, España.

A un mes de fallecer, la Cancillería mantiene "en el limbo" el cadáver de una dominicana en España

Familiares aseguran que se les informó investigan legalidad de sus documentos dominicanos

SANTO DOMINGO. - Descansar en paz no ha sido el destino del cuerpo sin vida de la ciudadana dominicana Ana Pie, fallecida en Viveiro, municipio de Galicia en España, el pasado 12 de junio. Desde ese día su cadáver esta refrigerado en la morgue del Hospital da Costa esperando por las gestiones que la Cancillería dominicana asegura hace para repatriar sus restos, diligencias que de acuerdo con amigos y familiares han sido retrasadas por falta de dinero y por investigaciones sobre su nacionalidad.

"Yo no tengo recursos para nada", aseguró ayer vía telefónica desde la provincia La Romana Ana Marlin Pie, tía de la fallecida y quien cuida a sus dos hijas de 17 y 15 años desde que Ana partió en el 2006 a Galicia con un contrato de trabajo en el sector hotelero.

Afirmó que hace más de 20 días fue recibida en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores en la capital y le fue entregada la copia de una carta en que se hace constar su solicitud de ayuda para repatriar el cadáver de su sobrina.

"Estoy esperando que me avisen desde allá (Galicia) para ir a recoger a Ana en el aeropuerto", dice al apuntar que no ha recibido ninguna información de parte de las autoridades consulares en el país luego de su visita a Cancillería.

El periódico La Voz de Galicia dio a conocer el caso el pasado 4 de julio. En su edición de ayer, el diario gallego informó que el Concejo de Viveiro tomará cartas en el asunto a expensas de la familia para enterrar el cuerpo de la señora -fallecida a los 40 años por problemas pulmonares- en una fosa común o cremarlo.

Nacionalidad en dudas

"Ella entraba y salía de República Dominicana, pagaba sus impuestos y aun en las elecciones votaba y eso no se investigó nunca. ¿Por qué ahora que muere investigan eso? ¿Por no ayudar a la familia a que tenga una sepultura digna como ser humano?", expresa vía telefónica el dominicano Isidro Montero, amigo de Ana y quien junto al señor Eduardo Fernández González, también residente en Galicia, sigue las gestiones de repatriación del cadáver de Ana en nombre de su familia.

Montero asegura que el cónsul honorario de República Dominicana en La Coruña, Galicia, Emilio Vicente Pérez Fontal, le dijo que la Junta Central Electoral (JCE) realizaba una investigación sobre la veracidad de los documentos dominicanos de Ana.

"Ayer (miércoles) por la mañana me dijo que el problema era que las autoridades de Sanidad tenían que verificar el cuerpo para ver si se le puede dar entrada a República Dominicana. A los familiares allá (en RD) le dijeron que se estaba esperando porque no se podía hacer un embarque con un solo cadáver, porque están esperando otro cadáver para llevarlos juntos, pero que también estaban investigando lo de su nacionalidad, que los documentos estaban en la Junta Central Electoral", manifiesta.

Esto después que desde el inicio de las gestiones se alegara que eran sus familiares que debían reunir los 6 mil euros para repatriar el cuerpo pues, afirma, "no era una obligación de ellos, que solo podían colaborar".

El señor Montero asegura que Pérez Fontal le comunicó luego que una compañía iba a embalsamar el cadáver por 1700 euros. "Le dije que si el problema era el dinero que hiciera lo que había que hacer, porque el dinero está".

DL contactó vía telefónica al señor Pérez Fontal, quien se negó a emitir declaraciones sobre el caso y remitió a Cancillería. En la tarde de ayer las autoridades diplomáticas en el país aseguraron que continuaban con el proceso de repatriación esperando que "a la mayor brevedad posible se superen los inconvenientes de índole legal y sanitario que hasta el momento han demorado el retorno".

Montero sostuvo que el Departamento de Sanidad de Galicia les informó ayer a él y a las autoridades del ayuntamiento de Viveiro, así como representantes de la Seguridad Social, que la delegación diplomática de RD no había remitido información de ese caso a su dependencia.

"Estábamos reunidos la alcaldesa y un chico de la asistencia social y en Sanidad nos dijeron que no le habían comunicado nada sobre eso. Lo llamó y le explicó y me dice que era Sanidad de Madrid, algo que no entiendo porque esto es autonomía y cada autonomía tiene un departamento de Sanidad. Se tiene que hablar con la Sanidad de Galicia, no de Madrid. Eso pasó ayer".

Argénida Romero
Diario Libre.com

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