Melvin Matthews.
Los seguidores de Leonel Fernández ya encontraron respuesta a la creciente ola de repudio a su líder. Puesta de manifiesto en la cobarde agresión a reporteros y a ciudadanos que rechazaban la exposición del ex Presidente en un hotel de Naco. La turba leonelista no reparó ni siquiera en el género, ni la actitud pacífica y comedida de los manifestantes. Horrorizan las imágenes de bandoleros despojando de un celular y agrediendo salvamente a una dama indefensa.
Confeso aspirante presidencial, Leonel se enfrenta al dilema de superar la situación que genera su presencia, dentro y fuera del país. Para sus estrategas debe ser ardua la tarea de revertir los efectos, no solo de estas manifestaciones, sino también de los procesos de corrupción que enfrentan dos de sus cercanos colaboradores y ministros de sus gobiernos, Félix Bautista y Díaz Rúa.
Sofocar con dureza tales desahogos populares no ha sido casual. Más de un analista auspiciado por el adinerado sector peledeista ha soltado perla sobre los pasos que darán en ese sentido. Melvin Matthews, articulista de Hoy, confiesa sin empacho ni el menor remordimiento, que “lo ocurrido frente al hotel Embassy es aleccionador (..) Los partidarios de Leonel lo hicieron duramente para que no se olvide”. (Yo, que me creía curado de espanto, sigo de una pieza, sobre todo tratándose de un viejo amigo, como lo es Melvin para mí).
Por lo visto, esas acciones anuncian una embestida feroz que irá arreciando en la medida en que avance y extienda el rechazo a Leonel. No se han medido las consecuencias de estas maniobras violentas. La historia no tiene buenos ejemplos en lo que se refiere a intentar frenar las expresiones populares de esta forma. El triple crimen de las hermanas Mirabal permanece tristemente en la memoria de los dominicanos. Debemos recordar, a propósito, crímenes igualmente horrendos, fruto de ambiciones continuistas, vale recordar a Mauricio Báez, Galindez, Guido, Segarra, Maximiliano Gómez, (El Moreno) Amín Abel, Orlando Martínez y Sagrario Díaz, entre otros.
Negarse a enfrentar la tozuda realidad del proceso que vive el país, parece estar llevando al ex presidente por un sendero sinuoso, reservado a quienes lo violentan.
Eduardo Álvarez
cenitcorp@gmail.com
El Nacional.com.do
http://elnacional.com.do/aquellos-polvos/
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