Conforme a unas declaraciones publicadas en la prensa dominicana el día 4 de octubre del presente, el Lic. Danilo Medina prometió “defender con uñas y dientes” sus visitas a los campos. Seguirá pretendiendo que son sorpresas, que son benéficas y que testimonian su sensibilidad ante la pobreza y el sufrimiento de los pobres. Sin desmedro de ese esfuerzo que el Sr. Medina asume, es nuestro deber y nuestra obligación recordarle que:
1ro.- Con uñas y dientes él tenía la obligación de obedecer y respetar las leyes dando así el ejemplo que el país necesitaba para que los males que flagelan nuestro pueblo no se agravaran.
2do.- Con uñas y dientes, el Sr. Medina tenía que defender y respetar la Constitución de la República no violarla, transgredirla y estuprarla de las tantas maneras como lo ha hecho.
3ro.- Con uñas y dientes, el Sr. Medina tenía que defender la soberanía nacional no ponerla en peligro contratando préstamos que él y todos los que están a su alrededor saben que no podremos pagar y sabiendo que el propósito de esos préstamos era mas el de enriquecer a los corruptos que el de disponer el uso de fondos propios para dichos propósitos.
4to.- Con uñas y dientes, el Sr. Medina tenía que haber defendido el patrimonio público no dilapidarlo ni subastarlo pagando a miles de parásitos un dinero que no es suyo sino nuestro y enlodando la honra propia y la ajena en tan penoso y desmeritado menester.
5to.- Con uñas y dientes, el Sr. Medina tenía que defender la integridad física de cada uno de nosotros evitando que el crimen se adueñara de las calles, que la inseguridad encerrara a la gente dentro de sus casas y que tantas vidas inocentes hubieran sido y sigan siendo asesinadas.
6to.- Con uñas y dientes el Sr. Medina tenía que haber asignado recursos y cambiar políticas para que la producción de alimentos dispusiera de precios y mercados que permitieran a los dominicanos comer aunque fueran plátanos sin que tuviéramos que horrorizarnos unos y avergonzarnos otros de que en La Florida, por ejemplo, el plátano cuesta el equivalente a 4.5 pesos ya que es ofrecido a 10 unidades por un dólar.
7mo.- Con uñas y dientes, el Sr. Medina tenía que haber luchado contra la impunidad para el crimen y los delitos que encontró ya cometidos pero también para los que se han cometido en sus propias narices y que, al final, disfrutan de la misma impunidad que ha protegido a los otros.
8vo.- Con uñas y dientes el Sr. Medina debió haber luchado por lo que prometió al electorado en su campaña y debió haber defendido la causa de los mas pobres, la causa de la justicia, la del derecho, la de la compasión para con un pueblo que sufre en lugar de empeñarse en el soborno de legisladores y en la tapadera de los crímenes, abusos y delitos que cometen a diario.
9no.- Con uñas y dientes si es que todavía le quedaran Sr. Medina usted puede, tiene el derecho y nuestra licencia para defender sus “visitas” pero no en sustitución de sus primeras obligaciones sino y solamente después de que haya cumplido con su deber defendiendo todo lo demás con “uñas y dientes”.
Es verdad que nuestra incompetencia nos ha condenado a ser sus víctimas. Es verdad que a diario nos llenamos de indignación y enojo ante todas las tragedias que acontecen por no haber defendido usted con “uñas y dientes” la justicia, la ley y el derecho pero, incluso por encima de tan justo enojo no puede uno evitar mirar en su dirección y encontrarlo, verlo como es y llegar a la conclusión de que, por su parte, usted es un personaje patético* si es que usted sabe lo que significa la palabra.
Melvin Mañón
Acento
* patético, ca.
(Del lat. pathetĭcus, y este del gr. παθητικός, que impresiona, sensible).
1. adj. Que es capaz de mover y agitar el ánimo infundiéndole afectos vehementes, y con particularidad dolor, tristeza o melancolía.
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