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miércoles, 17 de noviembre de 2010

Barrick Gold: Obreros heridos y destrucción


 Joaquín Jiménez fue baleado con perdigones.

Joaquín Jiménez, el obrero herido.

Obreros Barrick Gold.

Obreros heridos y destrucción en la Barrick
Los trabajadores protestaban por incumplimiento de convenios laborales con la empresa

PUEBLO VIEJO. COTUI. Violentos enfrentamientos a tiros, pedradas y bombas lacrimógenas entre obreros de la minera Barrick Gold y agentes policiales dejaron un saldo de 22 trabajadores heridos y varios detenidos, así como cuatro vehículos incendiados.

Los conflictos se originaron en la entrada principal de la empresa y se extendieron hacia el interior de la mina, pasada las diez de la mañana, en demanda de que la empresa contratista Graña y Montero cumpla con varios convenios laborales suscritos con los obreros, y que habrían sido violentados por la subcontratista laboral peruana.

Bernardo García, vocero de los obreros de la G & M, dijo que alrededor de tres mil trabajadores han sido afectados con el incumplimiento por los ejecutivos de Graña y Montero, que ahora se niega a pagar bonificaciones, seguro médico, aumento salarial y cesantía a los obreros que laboran al servicio de ésta en la mina de oro de aquí.

García responsabilizó directamente a los ejecutivos de la Barrick Gold de los nuevos conflictos suscitados entre la compañía subcontratista, por permitir que violente el código laboral en la minera, en perjuicio de los trabajadores.

Indicó que varios trabajadores han sido cancelados de manera abusiva, sin el pago de cesantía y sus prestaciones laborales, y que todo eso ocurre ante la mirada indiferente del Ministerio de Trabajo, y demandó su intervención, “para frenar los atropellos contra humildes padres de familia”.

Cuestionó la gran cantidad de mano de obra extranjera contratada, tanto por la empresa minera como por sus agentes contratistas, en desmedro de los dominicanos y residentes en Sánchez Ramírez y poblaciones vecinas.

La Policía
Tras las violentas manifestaciones, a la mina de oro fueron enviados agentes anti-motines desde San Francisco de Macorís, lo que agudizó los enfrentamientos a tiros bombas lacrimógenas y pedradas entre los trabajadores y los uniformados.

Los trabajadores heridos de perdigones fueron llevados a los hospitales de Cotuí y de Maimón y centros clínicos privados de las provincias Sánchez Ramírez y Monseñor Nouel.

Durante los enfrentamientos no se reportaron casos de policías heridos, en tanto que el tránsito a la capital fue bloqueado durante varias horas.
Ramón A. Salcedo Soto / Hoy

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