En 1954, el generalísimo Rafael Leonidas Trujillo Molina, visitó la madre patria España. Fue recibido, homenajeado y condecorado por su homólogo Francisco Franco. Esta es la portada del diario catalán La Vanguardia Española, del 5 de junio de 1954.
En el palacio de El Pardo, Franco condecoró a Trujillo con el collar de la Orden de Isabel la Católica, luego se sirvió un almuerzo en su honor.
Trujillo lo reciprocó a Franco imponiéndole la Gran Cruz-Placa de Oro de Trujillo. Un intercambio entre dictadores de pendejadas y guindalejas (o blimblines como dicen ahora).
Las dos fotos anteriores aparecieron en 1954 de esta manera.
Hace 58 años estos dos turpenes se regalaron condecoraciones como nosotros hacíamos con las postalitas en nuestra infancia.
¡Ya lo sabe!
¡Ya lo sabe!
Marihal / DLRD
Fotos- fuente: La Vanguardia Española, Barcelona. España
Nota: Recientemente nos enteramos que estos actos fueron cubiertos por el periodista dominicano Rafael Molina Morillo en los inicios de su fructífera carrera periodística. Esta cobertura de Molina Morillo fue para los medios de RD, las fotos que publicamos son de España.
Nota: Recientemente nos enteramos que estos actos fueron cubiertos por el periodista dominicano Rafael Molina Morillo en los inicios de su fructífera carrera periodística. Esta cobertura de Molina Morillo fue para los medios de RD, las fotos que publicamos son de España.
Comparar al Caudillo de España, que fue el General más joven de Europa y persona recta, virtuosa y honrada, con el tirano y ladrón Trujillo... es como comparar a Dios con un telepredicador.
ResponderEliminarLos dos estarán en el infierno eran dos asesinos...se protegidos por la iglesia,estos dos ladrones,es una vergüenza y una falta de respeto que...que tengan al asecinos(franco)cómo si fuera un dios,a Trujillo no permitimos su entierro en st,dm,Trujillo esta enterrado en españa.
ResponderEliminarTrujillo y Franco fueron dos asesinos sanguinarios que rivalizaron en crueldad y brutalidad al mando de sus naciones. Además de horripilante tirano, a la altura de Stalin,Trujillo era un personaje grotesco que desató todo tipo de burlas y bufonadas entre los militares y políticos de Franco. Se presentó ridículamente a las recepciones oficiales con un sombrero napoleónico, un morrión con plumas, con hombreras y chorreras que provocaban la risa entre los franquistas. Lamentablemente está enterrado en Madrid, al lado de su hijo Ramfis, un pobre hombre que no valía ni para follar (pagaba por eso) ni para asesinar como su padre. Trujillo y Ramfis deberían haber servido de pasto a los tiburones, a los que enviaron a infinidad de víctimas que se opusieron a sus sádicas torturas. Entre ellos Jesús Galíndez, desaparecido en marzo de 1956. Trujillo no merece más que el desprecio de cualquier defensor de los derechos humanos.
ResponderEliminarEntonces es un honor ser el General mas joven de Europa con mas asesinatos y abusos a sus compatriotas? Las cosas que uno tiene que leer. Hay gente que no aprende.
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