Michel Martely lo expresó delante del presidente Leonel Fernández.
Limonade, Cabo Haitiano, 12 ene (PL) El presidente haitiano, Michel Martelly, afirmó que la Hispaniola es única e indivisible al resaltar las estrechas relaciones que existen con Dominicana, naciones ocupantes de esta isla.
Martelly, junto a su homólogo dominicano, Leonel Fernández, inauguró aquí la sede universitaria donada por el gobierno de este último mandatario y que lleva por nombre Henri Christophe, esclavo que luchó por la independencia y fue nombrado presidente en 1806, autoproclamándose Rey Henri I.
En un día declarado de luto nacional, Martelly recordó a las víctimas del desastre sísmico el 12 de enero de 2010 y agradeció a Fernández la ayuda inmediata que prestó al pueblo haitiano, así como el llamado a sostener una conferencia internacional para que los Estados desarrollados prestaran la mayor asistencia posible.
Nuestros hermanos del Este, apuntó Martelly, creen en la solidaridad adecuada, la localización de esta universidad no es fortuita, sino que se inscribe en los planes de descentralización del gobierno haitiano.
En este centro de estudios superiores acudirán unos 10 mil jóvenes a desarrollar su potencial de conocimientos con el cual impulsar el crecimiento del país.
Más allá del sistema político defiende reducir la desigualdad social, mejora el capital humano porque estamos convencidos hoy más que ayer que esta universidad será una plataforma la cual permita recuperar los cerebros que se nos fueron para su desarrollo, agregó.
Esta universidad entra desde hoy en el patrimonio educacional de la nación haitiana, reiteró el dignatario, en una concatenada articulación que haga realidad el refrán que "el saber abre caminos".
Esto permitirá a los haitianos liberarse de las ataduras de la ignorancia.
Por último, Martelly asumió el compromiso ante el Gobierno y pueblo dominicanos de dar justo valor a este recinto universitario.
Fernández, por su parte, recordó que hace apenas una semana Dominicana fue sacudida por un sismo de 5,6 grados en la escala de Richter a las 05:30 hora local cuando solo algunos estaban despiertos y otros lo hicieron con sobresalto.
Nadie resultó herido ni las edificaciones sufrieron daños que no pudieran repararse, no obstante el temblor provocó gran temor, mucha angustia y ansiedad.
Eso permite imaginar lo que aconteció en Haití, donde las pérdidas humanas y materiales perturbó a esta nación. En esa oportunidad murieron 250 mil hermanos haitianos. Asimismo el equivalente al 120 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) se evaporó, indicó Fernández.
Hace dos años, miles de estudiantes perecieron, centenares de profesores quedaron sepultados bajo los escombros y cerca del 80 por ciento de las edificaciones universitarias fueron afectadas.
La tragedia haitiana fue la ocasión para que el pueblo dominicano demostrara lo mejor de sus cualidades humanas.
El gobierno dominicano sirvió de catalizador del deseo colectivo de su sociedad, de acudir en socorro y ayuda del pueblo haitiano, el cual enfrentaba situaciones de indescriptible dramatismo, apuntó.
Fernández explicó que la tragedia de Haití no comenzó hace dos años, sino en el momento en que sus líderes más prominentes no solamente anunciaron al mundo el nacimiento de un Haití soberano e independiente, sino que además tuvieron la osadía de romper las cadenas de la esclavitud.
Ese canto eterno a la libertad, dijo, fue paradójicamente la causa que dio origen a la difícil trayectoria histórica del pueblo haitiano.
Pero la tragedia de Haití se ha prolongado en el tiempo, más allá de lo humanamente aceptable. Ha llegado el momento que de la tragedia surja la esperanza, del dolor el optimismo y de la angustia la ilusión y la alegría.
Este es el significado simbólico que deseamos tenga la inauguración de este campus universitario Henri Christophe.
Por último, Fernández llamó a la comunidad internacional a cumplir los compromisos de ayuda a Haití que asumió desde hace dos años.
Puntualizó que el pueblo dominicano está con Haití como estuvo para socorrerles después del sismo y estará mañana para celebrar sus nuevas victorias.
Al acto asistieron miles de estudiantes haitianos, tanto los que usarán las nuevas instalaciones, como una representación de los que estudian en Dominicana y jóvenes dominicanos que vinieron a conocer la nueva sede universitaria.
Elsy Fors Garzon, enviada especial
ocs/ef
Prensa Latina
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