Danilo ha decidido "sacrificar" a Ng Cortiñas. Una baja que puede asumir perfectamente y con la que contenta a una ciudadanía cansada de abusos organizados al amparo del oficialismo. Se sacrifica un peón... ¿para ganar la partida?
El problema es que volvemos al mismo punto siempre. Las instituciones creadas para la supervisión del uso de los fondos públicos y/o para el combate de la corrupción nos cuestan dinero y trabajan NO cumpliendo cuidadosamente con su obligación. Nada cambiará, si la estrategia es avanzar en la institucionalidad cuando la prensa hace ruido, sólo cuando la gente se enfada.
Si la corrupción se combate a golpe de decreto presidencial, estaremos siempre a merced de intereses políticos del momento. ¿Dónde queda la Justicia?
Esa es la mala noticia. La buena, que Danilo ha señalado una vía de ahorro que puede ser importante. Nos ahorramos las pensiones irregulares (todas, no sólo la de este funcionario) y nos ahorramos, por inoperantes (y empezando con la oficina de Hotoniel Bonilla entera) las instituciones que trabajan tapando escándalos en vez de acabar con ellos.
¿Cuánto supone eso? Mucho; aunque se hable de mil millones arriba o abajo como si fueran mil pesos, el dinero cuenta desde el primer centavo. Sumen las pensiones ilegítimas, el barrilito, el Ministerio de la Juventud, las duplicidades en transporte y obras públicas... Hay tanto por dónde cortar, que es incomprensible que miren hacia el doble sueldo. Mil millones es mucho dinero. Todavía.
Inés Aizpún
IAizpun@diariolibre.com
Diario Libre
http://www.diariolibre.com/opinion/2012/10/23/i356794_mil-millones.html
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