Desde la izquierda, el abogado Abbe Lowell, Bob Menéndez, la abogada Jenny Kramer, y el Dr. Salomón Melgen comparecen ante el Tribunal Federal en Newark, Nueva Jersey. Fotografía: Elizabeth Williams / AP
Nueva York.-El futuro del senador demócrata Cubano-Americano de New Jersey, Robert –Bob- Menéndez, está en manos del médico Dominico-Americano de Florida, Salomón Melgen, ambos son coacusados de corrupción.
A Menéndez lo acusaron de aceptar sobornos por mas de $1 millón de Melgen.
El habría impedido que Estados Unidos le donara a la República Dominicana un equipo de Rayos X para inspeccionar cargas en los puertos. Luego presionó para que el Gobierno Dominicano le pagara a Melgen $500 millones anuales por alquiler aparatos de Rayos X idénticos a los que serían donados.
Melgen, un primo hermano e íntimo amigo del diputado Vinicio Castillo Semán, todavía no coopera con con las autoridades. Cuando le instrumenten cargos por cobros irregulares al Medicaid, tendrá que cooperar.
Melgen es el médico que más dinero ha cobrado del Medicaid en todo el país, se investigan irregularidades en unos $9 millones que cobró.
Melgen tirará a Menéndez al agua, cooperando con las autoridades reducirá su castigo si lo condenan por estafa.
Menéndez es un exiliado cubano ultraderechista que obstruye la política exterior del presidente Barack Obama en el Senado; esta opuesto a negociar con Irán y con Cuba.
Menéndez alega que él y Melgen son “buenos amigos” que se “intercambian regalos”.
Melgen le regaló más de $1 millón, pero Menéndez no le regaló nada parecido a su “amigo”.
Aquí cada cual salva su propio pellejo y, como en el caso de Alex Rodríguez y los esteroides, hasta primos de acusados pueden sonar en el proceso.
El juicio inciará en julio, pero intercambiándose documentos trasncurrirán verano y otoño, el proceso quizá arranque en invierno. Hoy, dos años después de que se llevaron camiones de papeles de la oficina e Melgen, no ha sido acusado, pero eso viene.
Esas cosas se toman su tiempo, cultivemos la paciencia.
J. C. Malone
Acento
Imagen: The Guardian
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