Páginas

domingo, 12 de marzo de 2017

Quién paga los mejores salarios en Punta Cana?

     Julio Iglesias y el fenecido diseñador dominicano Óscar De La Renta, en Punta Cana. Foto: Punta Cana Blog.

Julio Iglesias
La República Dominicana es una tierra bendita por Dios, a pesar de todos nuestros atrasos y penurias en gran parte los extranjeros que nos visitan de países desarrollados desean quedarse aquí, o por lo menos adquirir un pedazo de esta tierra linda llena de gente buena digna de mejor suerte.

Quien vé hoy día a Julio Iglesias con una villa espectacular en 'Los Corales' de Punta Cana, desconoce su histórica relación con los dominicanos. En los inicios de su dilatada carrera como cantante sus primeras presentaciones las hizo en el hotel Naco, en la Avenida Tiradentes del sector del mismo nombre. En la boite de ese hotel no cabían 300 personas y en el patio alrededor de la piscina donde recordamos concedió una entrevista al periodista de farándula Joseph Cáceres, ningunas de las personas presentes prestaban atención al españolito que se promocionaba.

Era la época en que Julio grababa canciones navideñas como 'En un burrito orejón'.

De los que triunfan y se hacen grandes sólo se dice lo malo, la típica envidia al éxito ajeno. En el presente contemplamos a Julio Iglesias disfrutar de su fortuna bienhabida, ganada con mucho talento, trabajo y esfuerzos, pero desconocemos los sacrificios y la buena cabeza utilizada para forjar esos bienes.

Mientras otros artistas que gozaron de la misma fama y buena venta de discos que Iglesias se dedicaban a derrochar sus ingresos con adulones y adentrándose en malos vicios, Julio Iglesia invertía su dinero en bienes raíces y negocios productivos ajenos a su profesión.

Hizo buenos tratos con su casa discográfica, grabó en varios idiomas conquistando públicos de otras lenguas que jamás un cantante de habla hispana soñó y vendió cara su figura y su melosa voz.

    Villa de Julio Iglesias en Los Corales, Punta Cana.  Foto: Lujanfraix blog.

Que sepamos, Julio tiene inversiones y mansiones por muchos países, Argentina, España, Miami (EE.UU.), etc., pero su villa de Punta Cana es algo sumamente especial. En Punta Cana se hizo socio en sus comienzos, junto a Oscar De La Renta (Q.E.P.D.) y otros buenos dominicanos que creyeron en ese espectacular proyecto. Esa casa tiene el gusto personal de Julio Iglesias.

Para llegar a ser lo que es hoy no sólo se han invertido muchos millones, sino muchas horas de trabajo y dedicación. Desde el famoso framboyán que fue trasladado de otra localidad hasta sus terrenos, hasta las miles de matas sembradas para cercar y adornar toda la propiedad. Julio es un administrador exigente y apostaríamos que en sus extensos terrenos no existe un sólo papelito sobre su superficie.

Los techos han sido cambiados en varias ocasiones, pisos y ventanales. Es un trabajo de nunca terminar, cada vez más elegante su decoración con elementos de Balí, España y El Caribe.

Julio es bien conocido y apreciado en Verón, Bávaro, Higüey y por supuesto en toda Punta Cana.
La gente lo respeta y le da el trato que merece para que se sienta bien, los pobladores no lo ignoran pero tampoco lo acosan. Es cierto que defiende su peso, pero al final paga, y paga bien.

Nos contó un suplidor que cuando hay alguien extraño en la villa, Julio Iglesias acostumbra a reunir al personal que trabaja en esta y les pregunta a viva voz:

¿Quién paga los mejores salarios en Punta Cana? - Y todos responden a coro: ¡Julio Iglesias!


Marihal / DLRD

No hay comentarios:

Publicar un comentario