Federico 'Quique' Antún Batlle, gerente general del BNV y presidente del PRSC. Foto: Acento.
¿A quiénes cuestionamos?
¿VALE LA PENA SEGUIR EN ESTO?
En los 9 años que tiene este blog nunca habíamos enfrentado una situación como la que está ocurriendo en el caso del Ing. Federico Antún Batlle y el Banco Nacional de la Vivienda.
El padre del señor Antún tuvo serios problemas en los gobiernos de Joaquín Balaguer con el manejo no transparente de la Lotería Nacional, de la que se salvó solamente por la estrecha amistad que lo unía al fallecido exmandatario. Uno de sus hermanos cayó preso siendo Leonel Fernández presidente, por un problema relacionado con un fraude en los sorteos de la misma Lotería, era socio del haitiano Frederick Mazurca, quien está prófugo todavía de las autoridades dominicanas al escaparse del país ilegalmente, en ese grupo también se encontraba el célebre Pepe Goico.
De allí surgió una enemistad entre Fernández y los Antún, que se zanjó con el nombramiento en 2010 de Federico Antún Batlle (Quique) al frente del BNV. Cuando esto sucedió la opinión pública no entendía cómo se nombraba en un banco del Estado a un jugador. Un ludópata que apuesta millones de pesos a las patas de un gallo. La primera regla de cualquier banco del mundo es no emplear a una persona que sea aficionada a los juegos de azar y los resultados están a la vista.
Hoy se destapa en toda la nación un escándalo donde se confirma que el señor Quique Antún recibió RD$12 millones y un poco más de "sus ahorros del plan de pensiones del BNV". El Presidente del Partido Reformista Social Cristiano nos hizo el favor de no pedir el 100% de lo que le tocaba legalmente, porque hubiesen sido
28.7 millones de pesos. Y continúa en el cargo de Gerente General porque
el Presidente de la República se lo pidió, en lo que le sacan el 10% a los Fondos de Pensiones para crear Bandex.
Dentro de una amistosa entrevista con el diario Acento
admite todo esto. Luego, comunica que le dio un préstamo del BNV
a su hermanito Eddy, por un monto de RD$96 millones, para exportar harina. Aclara eso sí, que su familia no quería aceptarlo, pero que él se responsabiliza de esa acción, que es legal y que no hay nada de malo en que él, el gerente general del BNV, obligue a su familia a aceptar un préstamo "malo" de RD$96 millones.
Como no tenemos nada personal contra el señor Antún, como él no es más que un peón del Comité Político del PLD, hemos llegado a la conclusión de que sus confesiones están basadas en que él sabe que no le pasará nada. Sabe que todos desde 2004, en todas las instituciones del Estado hacen lo mismo y por tanto, él habla con tal desparpajo de que de 28.7 millones que legalmente le correspondían, solo recibió 12 y pico de millones de pesos, con dos años de labores; y que su familia tiene un préstamo que él forzó a tomarlo por RD$96 millones de pesos del banco que gerentea.
No cuestionamos la expresión que usara el señor Quique Atún, "todo lo que tengo lo he trabajado".
No cuestionamos a Leonel Fernández ni a Danilo Medina, ambos responsables directos de todo lo bueno y malo que ha acontecido desde 2004 en la República Dominicana.
No cuestionamos la
honestidad e integridad del señor Antún, no emitiremos ningún juicio sobre este caso, no somos jueces ni fiscales, ni tenemos pruebas de nada.
A quienes sí cuestionamos es a nosotros mismos.
¿Qué sentido tiene seguir con esto?
¿Con qué objeto tratamos de que en nuestro país la corrupción merme y avancemos hacia un país mejor?
¿Cómo confiar de ahora en adelante en Danilo Medina y sus socios?
¿Cómo confiar alguna vez más en la Superintendencia de Bancos, la Procuradoría General de la República y en el Ministerio Público?
¿Para qué seguir escribiendo pendejadas si vivimos en una sociedad sin respeto, sin ley y sin ningún orden?
¿Para qué arriesgarse si estamos gobernados por una pandilla de corruptos amorales, sin el más mínimo disimulo por las formas, sin ética ni escrúpulos?
La entrevista al señor Antún del diario Acento, el caso BNV y la actitud del Presidente de la República y sus subalternos ante este y todos los casos importantes que le interesan a la sociedad nos han hecho reflexionar profundamente.
¿Vale la pena seguir con esto?
DLRD