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DOMINICANOS SOMOS. Vea las más leídas de la semana en la columna lateral derecha de este blog. / DLRD, desde el 1ro. de septiembre de 2005 en la W.W.W.

lunes, 6 de marzo de 2017

Presidente Danilo Medina: ¡muévase, sacúdase y espabílese!


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Junta Aeronáutica Civil, ver aquí.


CEA, ver aquí.


Ecocidio en San Cristóbal, ver aquí.


Ministro confirma hay derroche de los recursos del Estado, ver aquí.


Policías vagos, ver aquí.

La impunidad reina, ver aquí.


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¡Se le acaba el tiempo!


Juan Santos / DLRD

Porque tú me acostumbraste (Canción a la reelección) / Audio


El carguito que ma' guta'



Mercader
José Mercader
elCaribe
Tema: Porque tú me acostumbraste
Compositor: Frank Domínguez (cu) [1957]
Intérpretes: Trío Los Tres Ases (1958)
Olga Dipp / DLRD
Figureo en DLRD

En este país hay programas de radio y de televisión que cuestan más al Gobierno que el mantenimiento de un hospital


¿Bastarán los parches?
Aunque se sabe que la democracia es un proceso en constante construcción, muchos dominicanos se preguntan hoy si hemos llegado a un punto en que no bastarán los parches para remediar un cuerpo que ha sido invadido de tal manera por la enfermedad que parece insalvable.

La democracia representativa se basa en la separación de los poderes y en los “frenos y contrapesos”, por medio de los cuales cada poder sirve de contención a los demás, pero en la República Dominicana hemos llegado a un punto en que ni siquiera cuando la oposición controla uno de los poderes, funciona el sistema.

La democracia opera por medio de partidos políticos que articulan los intereses de la sociedad. En nuestro país, los partidos políticos no articulan nada, y sólo son fachadas para hacer negocios y obtener prebendas del Estado. Ahora mismo, miembros de los partidos políticos, por esa condición, son competidores de los empresarios legítimos, en una situación que hemos llamado la “corporación político-empresarial.

Dadas las características de la sociedad dominicana de hoy, el Gobierno ha sido capaz de penetrar todos los organismos sociales que podrían ofrecer algún grado de contrapeso cívico a la labor de las autoridades. Así, la compra de periodistas es rampante, las iglesias forman parte del entramado, y todo el que saca la cabeza en la sociedad civil consigue un “cargo público” que lo elimina como interlocutor válido.

En este país hay programas de radio y de televisión que cuestan más al Gobierno que el mantenimiento de un hospital.

Es evidente que se necesita un sacudón, pues no bastan los parches para sanar al enfermo.


Adriano Miguel Tejada
atejada[@]diariolibre.com
Diario Libre
Viñeta: El Roto

De João Santana depende / Vídeo


El elefante blanco
¿Quién contrató a João Santana? ¿Quién le pagó? ¿Dónde está el contrato? ¿Y el recibo? 
Aparte de notorias mejorías en la capacidad oratoria del presidente, exhibidas en la altisonante rendición de cuentas de la semana pasada, solo me interesa comentar lo del elefante blanco que daba tumbos a diestra y siniestra durante el solemne acto. El resto, el análisis y desmonte del contenido, comenzaron a escribirlo ya brillantes analistas, economistas, periodistas e intelectuales, basándose en hechos, números e impecables argumentos.

El mandatario  mencionó “las vacas sagradas”, especie criolla tan abundante aquí como en la India (puntualizó Colombo en una de sus  columnas). Sin embargo, se le olvidó nombrar a  un animal  imprescindible en toda esta zaga criminal de la que somos víctimas. Me refiero al “elefante blanco”, un mastodonte que persigue al Presidente por doquier y que insisten en negar dentro y fuera del gobierno (FINJUS, empresarios, periodistas y la justicia, también se resisten a nombrarlo).

Los sajones dicen “por ahí anda un elefante blanco”, cuando evaden problemas difíciles y comprometedores, cuestiones vergonzosas que no se quieren ventilar públicamente aunque sean de todos conocidas. Es la metáfora de la negación, parecida a aquella del Rey desnudo en la fábula de Hans Christian Andersen: los cortesanos temían decirle al Rey que estaba en pelotas, evitando ser castigados. Esa metáfora viene como anillo al dedo luego de las palabras presidenciales.

El prestigio y la credibilidad del Presidente no dependen de sus grandes logros, de promesas justicieras ni de la beatificación de Punta Catalina; depende de un paquidermo que ensombrece su existencia y tiene nombre: João Santana. Anda sobre cuatro preguntas que es imperativo contestar para poder acabar con su purgatorio y encaminarlo hacia la gloria eterna.

¿Quién contrató a João Santana? ¿Quién le pagó? ¿Dónde está el contrato? ¿Y el recibo?

Son preguntas fáciles de responder sino hubiese “gato entre macuto” de por medio. La hemos puesto sobre el tapete con anterioridad, igual que otros y el viento se las lleva, le sacan el cuerpo. No quieren entender que la redención de Danilo Medina depende de ellas. Dejando esa ecuación sin resolver queda la credibilidad del gobernante en entredicho.

Hasta algunos comensales del banquete de Punta Catalina tienen los escrúpulos de María Gargajo y les molesta el enorme cuadrúpedo que tiene detrás. Bajan la cabeza, pero cuando se van de palacio murmuran y critican al “elefante blanco” y a su poderoso socio.

Es urgente darle cuatro patadas al enorme culo del mamífero trompudo y quitárselo de encima a   Danilo. Si no lo hacen, seguirá siendo un sospechoso en la estafa Odebrecht. Tienen que dar un paso hacia delante y destapar el sobre con las respuestas.

Ahora bien, si esta cuestión es improcedente, si se nos aparecen bestias donde no las hay, entonces que expliquen por qué João Santana es irrelevante y no se debe hablar de él. Que nos den un “tapa boca” contundente y nos manden donde el psiquiatra. Mientras tanto, sin meterle el diente a esas preguntas, no valdrán discursos altisonantes, promesas, cifras ni aumentos salariales que puedan rescatar al Presidente del lío en que se ha metido.


Segundo Imbert Brugal
Catarsis
Acento




Punta Catalina es un Robo. Seg-2 03-03-2017 from Marino Zapete on Vimeo.



El Jarabe de Zapete

La paz sin dignidad no puede disfrutarse ni vivirse


Hasta un día
La paz es siempre deseada, pero qué es eso y cuál es su costo.  ¿Acaso es el deseo supremo de la vida? No. La vida y el instinto de mantenerla a toda costa la valoramos más que ella, aunque a veces parezca que no.

En el mundo no ha existido paz duradera, más que por unos cuantos años. En algunos lugares más y en otros menos.

Siempre la ambición de dinero fácil, de poder, ha hecho que haya una inestabilidad, donde la mayoría ha tenido que aguantar y someterse hasta que ha explotado ante el yugo, ante el abuso y la codicia de grupos que se asocian en el mal .

Nuestra historia es esa.  No hemos podido ser un pueblo que quiera vivir en paz, buscando el progreso y controlando sus ambiciones.

Desde el primer día de la independencia hemos sido el objeto de tira y jala, de revueltas e invasiones, de te tumbo a ti para subirme yo, por eso mucha nos extrañamos que EE.UU solo haya tenido 45 presidentes de 1776 a 2017, en 241 años, mientras nosotros hemos tenido 64 presidentes mal contados en 173 años, y digo mal contados pues entre asonadas, juntas gubernativas, etc. hemos tenido otros 7 provisionales.

Ahora tenemos en ciertos estratos de la sociedad paz, aunque en los barrios y entre la gente pobre, no, empezando con que la pobreza es quizás la peor violencia.

Ahora y desde hace ya demasiados años nos esquilman, nos roban, nos abusan.  Dominicanos sin sentimientos suben al poder, se alían y la fiesta sigue a palos de tambora y a palos contra el pueblo.

Los supuestos a administrar el país, lo administran para ellos, no rinden cuentas, se creen intocables y superiores, se enriquecen y mantiene sumisos a los que siguen valorando la paz quizás más que sus vidas. Pero todo cambia un día y a todo puerco gordo le llega su San Martín.

Quizás ya la gente se esté hartando de tanto fuego de arriba y se voltee, y los “honorables” tengan que ocupar el lugar que les corresponde: en la cárcel o el cementerio.

Y es que la paz sin dignidad no puede disfrutarse ni vivirse.

Luis Arthur
7dias

Frases célebres: Alfredo Freites (3)

     Alfredo Freites, columnista del Listín Diario.

Así se expresa la cleptocracia gobernante sobre corrupción e impunidad

"Al tema de Odebrecht se le otorga la dimensión de tsunami político cuando no es tal. Es un escándalo que va en desarrollo, que si bien podría afectar al Gobierno-Danilo- PLD-Leonel, su proyección podría estar siendo abultada. Todo es cuestión de cómo termine el caso. Los políticos que están al mando son diestros y cuentan con recursos técnicos y financieros para diluir crisis".

+  Expresadas por el comunicador en su columna del Listín Diario 'Punto de Mira', en su artículo: Duelo sin cadáver.

Luis Del Monte / DLRD

domingo, 5 de marzo de 2017

Expresidente de España advierte sobre Donald Trump


Trump: los muros de su cerebro
El presidente de Estados Unidos solo confía en sus “pulsiones” sicopáticas y en los que adulan sus modos insultantes y engañosos. Sus políticas proteccionistas y el rechazo a la globalización llevarán al país a la decadencia como “primera potencia”

La política como gobierno del espacio público que compartimos está atrapada entre la arrogancia tecnocrática y la osadía de la ignorancia. Entre los “brillantes” posgraduados que creen que la complejidad de los problemas sociales se resuelve con algoritmos infalibles de laboratorio; y los necios, los que no saben, pero no saben que no saben y ofrecen respuestas arbitristas que simplifican y distorsionan la realidad.

Ni unos ni otros dudan cuando incursionan en el espacio público, como portadores de la “verdad” o de la “posverdad”. Y aunque mi reflexión hoy está dedicada a los segundos, no deja de preocuparme la arrogancia distante de estos supuestos sabios que nunca explican sus errores, porque para ellos es la realidad la que falla.

El necio puro (ne scio) es bastante inofensivo, incluso positivo cuando sabe que no sabe y busca apoyo para cubrir su ignorancia. El necio peligroso es el que tiene poder sobre los demás y, como no reconoce su ignorancia, menosprecia la opinión de los otros. Trata de imponer su “posverdad” simplificadora, se busca enemigos como responsables de la realidad que se inventa, aunque aproveche algunos elementos de la verdad y los miedos que esta genera siempre.

Los muros más peligrosos de Trump están ya construidos y petrificados en su cabeza. Son los que más deberían preocupar en Estados Unidos, en México o Latinoamérica, en la Unión Europea y en el resto del mundo, porque este personaje está al frente de la “todavía” primera potencia del globo. En su mente nunca hubo un proyecto para gobernar la diversidad que hace fuerte a su país. Nada parecido a un programa de gobierno en su campaña y, menos aún, en su discurso de investidura. Porque este señor solo confía en sus “pulsiones” sicopáticas y en los que adulan sus modos insultantes y engañosos.

Si cualquier mandatario del mundo hubiera descrito la “realidad” americana como lo hizo Trump en su discurso de toma de posesión, lo habríamos descalificado como sectario y fanático cargado de odio hacia Estados Unidos. Merece la pena analizar esa “oratoria” digna de un autócrata que se siente por encima de las instituciones, que desprecia a su propio pueblo, que busca enemigos y culpables en los que no son como él, sean inmigrantes, mujeres o minorías de cualquier tipo. En esa pieza inaugural se comprenden qué tipo de muros anidan en su cabeza y orientan sus abundantes decretos presidenciales o sus constantes tuits.

Habría que esperar que una parte de los “apaciguadores” que afirmaban (todavía quedan muchos) que no haría lo que proponía en su campaña o en sus muchas medidas de estas semanas de ejercicio efectivo de la presidencia estuvieran ya apercibidos de lo que se propone. Porque demuestra una audaz ignorancia de la realidad interna y externa sobre la que trata de proyectar su poder.

También es lógico esperar que sus imitadores se crezcan y multipliquen complicando la gobernanza de la democracia representativa, la única que ampara nuestras libertades, en los espacios del mundo en que existe. Y poco importa que se presenten bajo el paraguas, más supuesto que real, de ideologías de izquierdas o de derechas. Lo que los une, o los junta en “manada”, es su posición etimológicamente reaccionaria ante el vértigo de los cambios inducidos por la revolución tecnológica y su aprovechamiento fraudulento de miedos comprensibles en conjuntos sociales sensibles.

Porque estamos viviendo una transformación a nivel global que, como lo fuera la Revolución Industrial, no es reversible, que genera una interdependencia creciente, que cuestiona al Estado nación como ámbito de realización de la soberanía, de la democracia o de la identidad. La diferencia con la Revolución Industrial es la vertiginosa velocidad de la implantación de la actual.

Los reaccionarios aprovechan el miedo al cambio, cierran fronteras, rechazan al otro, al que es diferente, se atrincheran en el nacionalismo sin memoria de la destrucción que provocó en el siglo XX. Vuelven al proteccionismo y las guerras comerciales. Una revuelta contra la revolución tecnológica que utiliza los medios de esta para negarla y enfrentar a la defensiva sus consecuencias.

Pero hay algo detrás del triunfo electoral de personajes como Trump que revela la necesidad de introducir elementos de gobernanza en la globalización, para hacerla más previsible y, sobre todo, para hacerla más justa en la redistribución, para replantearse el modo y tiempo de trabajo disponibles. La función de la política progresista no es rechazar o negar el cambio tecnológico, ni instrumentalizar los miedos que genera para replegar a nuestras sociedades en busca de “utopías regresivas”, sino prepararnos para enfrentar ese cambio aprovechando lo que ofrece de bueno y minimizando los riesgos que comporta para no dejar a nadie en la cuneta.

La primera sociedad que va a pagar el precio de los muros mentales de Trump es la americana. La buena noticia es que esta sociedad está reaccionando inmediatamente, movilizándose para combatir desde dentro las pulsiones reaccionarias y discriminatorias instaladas desde el 20 de enero en la Casa Blanca. Son conscientes de que estas políticas niegan la diversidad de la propia sociedad americana, la que le da complejidad pero también fortaleza. Son conscientes de que EE UU es una sociedad de minorías entrelazadas en las que la imposición de una de ellas sobre otras los lleva a una nueva “caza de brujas”, al aumento de los delitos de odio contra el que ven como diferente y, por eso, culpables. Son conscientes de que están en peligro derechos civiles dolorosamente conseguidos. Una sociedad construida por y desde la inmigración que no puede satanizarla.

Tal vez no sepan, todavía, los efectos económicos y sociales de estas políticas aislacionistas y amenazantes. En la mente amurallada de Trump no entra la comprensión de lo que es una empresa global y Estados Unidos tiene las principales empresas globales del mundo. Son empresas que producen en el mundo, buscando economizar costes y buscando talento allá donde lo encuentran. Son empresas que venden en el mundo y prefieren un comercio abierto. Claro que la obligación de la política es limitar los abusos con marcos regulatorios razonables, pero no cerrar las fronteras y provocar guerras comerciales.

Como no es posible ser una potencia global sin empresas globales, en la era Trump Estados Unidos iniciará su decadencia como “primera potencia”. No puede esperar que sus empresas produzcan en EE UU, que los americanos consuman lo que allí se produce y que los demás países sigan consumiendo lo que venden sus empresas globales.

¿Cómo va a combinar política de aranceles altos y desplazamientos de producción mucho más costosos a Estados Unidos sin encarecer los precios para el consumidor americano y empobrecerlo en la práctica? ¿Cómo bajará los impuestos y aumentará el gasto (infraestructuras y defensa) sin desequilibrar las cuentas públicas? Seguramente pensará que él mismo puede servir de ejemplo evadiendo impuestos. Claro que eliminará gastos sociales (en salud y en otros rubros), rompiendo todos los resortes de la cohesión social.

La democracia no garantiza el buen gobierno, pero nos permite cambiar al que lo hace mal. Por eso, a la larga, es siempre mejor. ¡Mantengamos la esperanza!


Felipe González Márquez
Expresidente de España
El País

Te ke re ke te!

(Haga clic sobre la imagen para accesar a la lectura).


A Dios rogando...



Olga Dipp / DLRD
Figureo en DLRD

Puerto Plata Marcha Verde


Contra la corrupción y la impunidad










1 al 9, imágenes de Z-101 Digital.




10, 11 y 12, imágenes de Acento.


13, imagen de Hoy.


14, imagen de elCaribe.





15, 16, 17 y 18; imágenes capturados de un vídeo de Somos Pueblo.


19, imagen de Marino Zapete y Minou Tavárez Mirabal...marchando!


20, Parque La Libertad, Puerto Plata. Imagen de Somos Pueblo.




21, 22, y 23; imágenes de Somos Pueblo.








224, 25, 26, 27, 28, 29 y 30; imágenes de Marino Zapete.


¡Puerto Plata se pintó de verde!


Luis Del Monte / DLRD

Rector peledeísta de la UASD impide autobuses salgan hacia Puerto Plata


Terror al verde y a las marchas
LA MARCHA SIGUE EN PUERTO PLATA
Claudio Caamaño denunció este domingo, a través de un video publicado en su cuenta de Twitter, que el rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) no permitió la salida de autobuses de ese recinto hacia la Marcha Verde contra la impunidad en Puerto Plata.

Según Caamaño, los cinco autobuses habían sido autorizados y se encontraban en el recinto universitario desde las 5:30 de la mañana.

"A las 7:00, encima de los autobuses, nos enteramos que el réctor Iván Grullón Fernández ordenó que esos autobuses no podían salir de aquí", aseguró el joven al tiempo de informar que producto de esta decisión quedaron varadas más de 100 personas.

"El rector peledeísta, asumiendo líneas del PLD, ordenó que esos autobuses no salieran de aquí", finalizó Caamaño.


Z-101 Digital

Abinader, Hipólito, Odebrecht y Punta Catalina


Enfrentar la manipulación mediática
Durante esta semana que hoy culmina la cleptocracia gobernante, que ha sufrido un revés inesperado con la correcta decisión de un juez, trata de introducir el tema de Hipólito Mejía, Luis Abinader y el PRM como estrategia para sacar de el tapete lo que realmente nos interesa a los dominicanos.

Los que desgobiernan tratan de tapar con el usual manto de la impunidad el robo evidenciado de los recursos públicos en las obras de Odebrecht y especialmente en las plantas eléctricas a carbón que se construyen en Punta Catalina, Baní.

De lo que se trata es de una campaña electoral de un candidato "ganador" financiado con recursos extranjeros. De lo que se trata es que una obra que debió costar menos de la mitad se sobre valuó para favorecer a grupos económicos, políticos y financiar a un partido y a un candidato. De lo que se trata es de que los más altos estamentos oficiales y empresariales han sido pillados en una mafia multimillonaria y que no encuentran forma de desentenderse.

La ardua defensa a proyectos que sin ninguna duda están viciados serán pruebas contundentes ante los magistrados de la Suprema Corte de Justicia cuando llegue la hora de dar explicaciones. La larga lista de casos de corrupción que se han sucedido desde 2004 a la fecha están debidamente documentados y sus implicados identificados, son tantos que las cárceles no darán abasto para acoger a altos dirigentes políticos, funcionarios, congresistas, jueces, empresarios, ensotanados y uniformados.

Hay que ignorar la campaña mediática, la respuesta del pueblo debe ser la misma que hemos estado dando desde hace meses:

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Jeannelle Koss / DLRD

sábado, 4 de marzo de 2017