La lucha por Loma Miranda parque nacional ha fructificado con el más fiel retrato del Palacio Nacional como dócil instrumento de los megapoderes locales y foráneos que despojan al pueblo dominicano de sus bienes inalienables, incluido el derecho a una vida digna.
Loma Miranda merece un reconocimiento por el mérito de lograr que el gobierno de Danilo Medina evidencie su servilismo incondicional al poder extranjero y a un empresariado que recrea la intolerancia de sus antecesores cuando articularon la conspiración culminante con el golpe de Estado al gobierno de Juan Bosch.
La bandera Loma Miranda parque nacional simboliza la dignidad de los dominicanos resistiendo a un desgobierno del PLD que se burla con descaro del propio Juan Bosch al fingir un alegado “amor a la patria” que ni ellos mismos se lo creen.
Es abrumadora la ofensiva mediática de los poderes fácticos apoyando a Danilo Medina por truncar la decisión con Loma Mirada, mientras su gobierno se arrodilla inmutable ante quienes actúan como sus amos.
Entre esos comunicados recordatorios de 1963, figura uno de las publicitarias, que debieran publicar los montos desbordados en publicidad de los gobiernos del PLD a costillas del contribuyente.
El descalabro institucional de desconocer viejas sentencias favorables al parque nacional Loma Miranda no lo olvidará la opinión pública con alboroto mediático poniendo en pantalla “al narcotraficante más buscado”.
En Palacio deben respetar el sentido común de los dominicanos. Amor a la patria fue el de Manolo Tavárez, Juan Miguel Román, Rafael Fernández Domínguez y el coronel Francisco Alberto Caamaño.
Como miles de dominicanos, ellos se sacrificaron por no humillarse a la voluntad de los falsos dueños del país.
La regresión que registran los mandatos PLD y de los demás partidos politiqueros es que estamos peor que en 1961-62, en múltiples aspectos, mientras el control gubernamental resulta más fétido y mugriento que el vertedero de Duquesa.
Pero no hay mal que por bien no venga. Ha sido de gran enseñanza la sazonada “solución” de “arriba” al tollo de Palacio con Loma Miranda, emanada de un bufete privado y pagado con dinero público.
El retrato del Palacio es de un profundo contraste entre la estridencia soberanista de La Habana y la sumisión humillante ante FALCONDO.
Raúl Pérez Peña (Bacho)
PANCARTA
Listín Diario.com.do
http://www.listindiario.com/puntos-de-vista/2014/9/5/336576/Miranda-retrata-Palacio-y-la-vil-regresion-del-PLD
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