Un conocido comunicador de un escuchado programa radial matutino cometió una bajeza imperdonable en contra de la memoria de José Francisco Peña Gómez, hoy lunes 16 de mayo de 2011. El libertinaje en los medios de comunicación no respeta ni a los muertos. Ni siquiera a personas de un corazón noble como lo fue el Dr. Peña Gómez, quien fue capaz antes de su muerte de perdonar a todos aquellos que en vida lo hostigaron y maltrataron.
El díscolo periodista se atrevió a manifestar públicamente que el ex presidente Juan Bosch había sorprendido al Dr. José Francisco Peña Gómez manteniendo relaciones sexuales con una doméstica.
Al escuchar esto sentí la vergüenza ajena. Pensé en los hijos, la viuda, los familiares, los seguidores y compañeros de partido. Pensé en todas las señoras que escuchaban ese programa, los niños e inclusive los propietarios de ese medio de comunicación.
La memoria de los muertos se respetan. El doctor Peña Gómez no puede defenderse de esa vil acusación.
Eso fue escuchado por medio país y será comentado por la otra mitad. El comunicador asegura que esto le fue contado por el profesor Bosch, cosa que no puede comprobarse por estar muerto también.
Entendemos que si una persona no está mentalmente capacitada para hablar en público, lo correcto es apartarlo de los medios de comunicación y buscarle trabajo de escritorio. Ya anteriormente la semana pasada este mismo caballero insultó al jefe de la Fuerza Aérea Dominicana, relacionado con su anuncio de que los aviones que bombardeaban drogas habían terminado, lo expresado en contra de este correcto militar no ha caído muy bien entre los uniformados y la opinión pública.
Los directivos y propietarios de ese medio de comunicación deben pensar un poco más en la sociedad. No lo están haciendo bien permitiendo este tipo de inconductas. Ojalá se reflexione y se analicen estas dos situaciones expuestas aquí, las cuales planteamos de la mejor buena fe.
John Goodman / Desde La República Dominicana
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