Tras 13 años sirviéndose a su antojo directamente del poder y de la economía del país, el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) ha dejado establecido, con claridad meridiana y sin tapujo, que dondequiera que hay un peledeísta hay un corrupto y, además, que la gente en la República Dominicana se debate entre el “palantismo” y el “¡nos jodimos!”.
Para quienes llevan anotaciones, el vocablo “palantismo” fue certeramente acuñado por Valerio Lara dándole categoría de doctrina a la proclama “e’pa’lante que vamos” con la cual Leonel Fernández, a partir de 2004, desvencijó completamente al bochismo en el PLD, algo que tornó al partido en la corporación política más rica y poderosa del país, actual rectora de los otros partidos llamados grandes, de casi todos los medios de comunicación y del indecente aparato judicial del país. Bajo su control también tiene al empresariado nacional con pasado chantajeable.
El “¡nos jodimos!” es la angustiosa y cotidiana proclama que una mayoría sin capacidad de indignación expresa cotidianamente en sus comentarios por los medios de comunicación, mientras observa detrás de las rejas de los hogares el saqueo de sus bienes iniciado de forma altanera, arrogante, por Leonel y continuado con sencillez y mayor eficacia por Danilo Medina.
Así que Danilo, saltando un charquito por ahí, dando otro brinquito por allí, colándose sin susto -para algo es el presidente- por una alambrada o por una puerta mal cerrada está a muy pocos días de celebrar su primer año como mandatario. Hay que reconocer que ha sido un año totalmente fructífero para las arcas del Palacio Nacional, pues los combustibles se están vendiendo a precios récords y el aumento del Itebis ha sido un éxito total.
Danilo, con claridad meridiana, ha dejado establecido que cambiando la forma se puede joder un poco más y con mayor facilidad a un pueblo jodido desde hace tiempo. Ha demostrado también que Leonel y él son roedores de la misma camada, del mismo barco y que sin problemas pueden nutrirse como y hasta que quieran de la abarrotada bodega.
Ya Leonel dijo que lo harán hasta 2036. No sé a Usted, pero a mí me extrañó que un tipo con la angurria demostrada por el jefe del PLD haya fijado un límite para mantener a su corporación explotando al país.
Humm… algo que los legos no podemos ver está viendo El Camaleón. Puede ser que ya calculó que para la fecha indicada la bodega estará totalmente agotada. O que la Barrick Gold habrá cargado con la última onza de oro de Cotuí y que Loma Miranda estará convertida en una accidentada llanura. O que los haitianos -los únicos que tomando medidas en su territorio han generado algo de inquietud a la presidencia de Danilo- estarán en número y en condiciones para una sublevación en el lado nuestro a ocho años del bicentenario de la Independencia Nacional.
¡Quién sabe lo que habrá calculado Leonel que lo motivó a poner límite a la depredación del país por parte de su corporación! Por hoy, me voy. Que Dios le llene de bendiciones y se apiade de la República Dominicana.
Rafael Calderón
ENTRE USTED Y YO
7dias.com.do
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