SANTO DOMINGO (R. Dominicana).- Los vínculos económicos entre el grupo español Prisa, editor del periódico español El País, y la Fundación Global Democracia y Desarrollo mandan a paseo la ética profesional del “mejor periódico en español”, cuya lectura el presidente Leonel Fernández recomienda para aprender el idioma.
Durante varios años, Iban Campo compartió la corresponsalía de El País con su puesto de director de Comunicación de Funglode, sin que ni uno ni otro se ruborizara por esta dualidad. Jamás en las notas escritas por Campo sobre la República Dominicana apareció al pie, para edificación de los lectores, que el periodista era asalariado del presidente que entrevistaba o sobre el cual hablabla.
Casi la totalidad de las notas escritas entonces por Campo están marcadas por su vínculo con Fernández. Para muestra, un botón: en la nota encabezada con el sugerente título “La República Dominicana se refunda”, en la que encomia la Cumbre de la Unidad Nacional de principios de 2009, aparece esta perla: “Ahora bien, hay ausencias. Militantes de grupos sociales y políticos habituados a protagonizar protestas y huelgas han convocado un foro paralelo. El principal partido de oposición, el Revolucionario Dominicano, tampoco participa. El pasado lunes, seis días después del inicio de los trabajos y tras varios intentos fallidos, sus principales gestores lograron reunirse para poner condiciones a su asistencia: "Cuando el poder ejecutivo demuestre con acciones, y no con discursos y promesas vacías, que se cumpla lo acordado".
La revisión de los archivos de El País sobre la República Dominicana en busca de opiniones disidentes de Fernández será, hasta hoy, infructuosa. Ni un solo líder de la oposición, ni una sola voz crítica, salvo como opinantes circunstanciales a los que se dedica un párrafo, si acaso.
Este pasado domingo le tocó el turno a Moisés Naím, un reputado escritor venezolano que durante catorce años dirigiera la revista “Foreing Policy”, ahora comentarista del mismísimo periódico.
Apelando a una supuesta crítica del machismo en la política internacional, Naím parte de la candidatura de Hipólito Mejía para enmascarar su mensaje a favor del gobernante Partido de la Liberación Dominicana y sus candidatos, específicamente de Margarita Cedeño.
En el artículo “Llegó Papa”, Naím comienza tipificando a Mejía como “populista”. Con su eslogan, escribe, visita los barrios pobres “repartiendo dinero, ropa y comida”. Y promesas. El candidato perredeísta promete a los pobres “que Papá les dará lo que no tienen y nunca han tenido”. Naím no puede evitar el tono preocupado: “Las elecciones son el próximo mes de mayo y Mejía, quien ya fuera presidente entre 2000 y 2004, podría ser reelegido a pesar de que, durante su mandato, el país sufrió una de las peores crisis económicas de su historia”.
El articulista recorre, pues, los caminos que le interesan cuidando habilidosamente de no meter la pata con aquellos a los cuales planea finalmente beneficiar. Mezcla gobernantes y hechos como si batiera una coctelera. Deshistoriza la política y los políticos que menciona. Guarda conveniente silencio. “Observador global”, es el nombre de su columna, presume de sus capacidades para establecer similitudes. La arbitrariedad salta a la vista del lector mínimamente informado. Pero el autor confía en que sus juegos manipuladores funcionen.
Bajo el epígrafe “Machismo”, habla de Mejía, su verdadero blanco, en el mismo párrafo en que alude a las sesiones de bunga-bunga del italiano Silvio Berlusconi, los pectorales al aire del ruso Vladimir Putin, el ofrecimiento público del venezolano Hugo Chávez a su esposa de “darle esa noche lo suyo”. Mejía es “papá”, Berlusconi “papi”. Descontextualiza los apelativos para igualar a sus criticados.
Bajo el de reelección, Naím habla de “la pasión por la reelección que muestra Hipólito Mejía” , y vuelve a compararlo en esta vertiente con Putin, Berlusconi, y el francés Nicolás Sarkozy. Afirma con desparpajo intelectual que desconcierta, que cuando la reelección está prohibida los políticos populistas, entre ellos Mejía, hacen cualquier cosa para burlar esta prohibición. Verbigracia, Chávez, el boliviano Evo Morales, y el ecuatoriano Rafael Correa.
A continuación escribe sobre la tendencia a reelegir a "los malos”. Ya había dicho que durante el mandato de Mejía “el país vivió una de las peores crisis económicas de su historia”, por cuyos orígenes no se preocupa, y que pese a ello podía ser reelegido. Así que cuela a Mejía entre los "malos" apelando a un recurso subliminal. Se dedica al nicaragüense Daniel Ortega, quien para quedarse en el poder, dice, no dudó en “violar la Constitución”, teniendo como padrinos a Chávez y al iraní Mahmud Ahmadineyad. Tríada maléfica que solo ha traído involución a sus respectivos países.
La guinda del pastel
Todo el ejercicio pretendidamente analítico de Naím tiene un solo y descarado objetivo: gritar a pleno pulmón, en el último epígrafe: “¡Llegó Mamá!”, con la excusa, intelectualmente burda, de alegrarse del progreso político de las mujeres.
“Una mujer podría descarrilar los planes de Mejía, que lideraba las encuestas. Hasta que la actual primera dama, Margarita Cedeño (el personaje político más popular del país), decidió lanzarse como candidata a la vicepresidencia. Ahora Danilo Medina, el candidato del Gobierno y rival de Mejía, ha pasado al primer lugar gracias a que el 25% de quienes dicen que van a votar por él afirman que lo harán "por Margarita". Y esta es otra tendencia latinoamericana que ojalá se haga mundial: cada vez hay más mujeres en el poder”.
¿Periodismo ético? No el de El País, desde luego. Periodismo pagado con los negocios con Funglode. Ceguera voluntaria porque reditúa. Negocios son negocios.
Margarita Cordero
7dias.com.do
Caricatura: http://lajovencuba.wordpress.com/2011/03/02/el-pais-versus-la-joven-cuba/
http://7dias.com.do/app/article.aspx?id=115229