En mis sueños
Ayer te vi, estabas linda, preciosa, como siempre desde que te conocí.Ayer te vi y no pude disimular mi alegría al verte de nuevo, otra vez.
Mucho tiempo había pasado desde que mi ojos tuvieron la dicha de contemplarte, al observarte junto a tu esposo, tus hijos y tus nietos; me emocioné lo mismo por ti que por ellos. Qué dichosos de tenerte a su lado, qué suerte tener una matriarca como tú.
El pelo blanco le sienta bien a tu rostro, esos kilos que te han heredado los años no son suficientes para mellar tus bien formadas piernas. Mantienes la misma sonrisa que adornas tan bien con tu perfecta y brillante dentadura, el calendario no ha podido contigo.
A mis setenta y tantos (solo te llevo dos) no esperaba estar vivo a estas alturas ni mucho menos soñaba con volverte a ver. Y ya ves, ayer te vi.
Ayer te vi y estabas tan linda y preciosa como cuando te conocí.
Marihal / DLRD
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