Luego de leer este reporte de Frank Pacheco para el digital de la Z-101, será muy difícil que los diputados dominicanos puedan continuar haciendo clientelismo político con excusas como las que penosamente dio el Presidente de la Cámara de Diputados para justificar la dilapidación de 176.9 millones de pesos en el Día de las Madres.
Todos y cada uno de los legisladores que han aceptado dádivas compradas por otros con los recursos públicos que pudieran destinarse para la salud y la alimentación de la parte más pobre de nuestro país, para repartir en ocasiones festivas con fines proselitistas y de beneficio político personal han llenado de vergüenza el oficio de legislar, la facultad de fiscalizar.
Después de este análisis sobre lo gastado por los congresistas y lo asignado a los hospitales públicos, ser diputado en República Dominicana se convierte en una vergüenza.
Jeannelle Koss / Desde La República Dominicana
La pasada semana trascendieron dos noticias en el país, una de ellas: que el hospital infantil Robert Reid Cabral “se iría a la quiebra” por el atraso de la asignación mensual que se le debe entregar, situación que provocó que los suplidores del centro médico retiraran el crédito.
De igual modo, caló la noticia de que la Cámara de Diputados aprobó la entrega de 176.9 millones de pesos en electrodomésticos, a ser repartidos entre los legisladores de ese hemiciclo, para que éstos los regalaran el “Día de las Madres”.
A propósito de estas informaciones, El Movimiento Médico Doctor Tejada Florentino develó este miércoles las deudas millonarias que ostentan los principales hospitales públicos del país, por el atraso en el pago del Ministerio de Salud Pública.
La suma del pago mensual que realiza el Ministerio de Salud a 15 hospitales de masiva asistencia en República Dominicana asciende a 56 millones 127 mil 900 pesos, cifra que triplica (en un día) el gasto de la Cámara de Diputados para la referida celebración.
En ese sentido, la agrupación de galenos detalló que el hospital doctor Luis Eduardo Aybar tiene una subvención de apenas RD$7.6 millones mensuales, recursos que hace cuatro meses no llegan al centro médico, contribuyendo así a la deuda de RD$200 millones que ostenta el hospital.
De igual modo, el hospital infantil Robert Reid Cabral, con una subvención de RD$7.3 millones (dinero que no se recibe hace tres meses), exhibe una deuda de RD$70 millones. El Arturo Grullón (centro infantil, en Santiago) tiene dos meses que no se le entrega la subvención de RD$7 millones y ostenta una deuda de RD$70 millones.
“Denunciamos el deplorable estado de abandono en que se encuentran los hospitales públicos, mientras el Gobierno estrangula, no sólo con pírricas asignaciones sino con la mal sana práctica de retenerles varias de las mensualidades, llevando a una estado tal que los proveedores externos les retiran el crédito”, indicó el Movimiento mediante un comunicado.
Precisó que el hospital Juan Pablo Pina, en San Cristóbal, cuenta con una subvención -con tres meses de atraso- de 5.3 millones de pesos y una deuda acumulada de RD$40 millones; mientras al Doctor Limardo en Puerto Plata se le asignan RD$2.4 millones mensuales, y lleva tres meses de atraso y 18 millones de pesos de deuda.
El hospital San Vicente de Paul, en San Francisco de Macorís, ostenta cuatro cuotas atrasadas de RD$3.5 millones asignados. Presenta una deuda de RD$16 millones. El hospital Luis Bogaert en Mao, Valverde, posee una asignación de RD$1.4 millones y un atraso con los suplidores de RD$7 millones.
“Es lamentable que mientras esta catástrofe humana acontece, el Gobierno se embarca en megaproyectos, posiblemente para cumplir compromisos políticos, que consume enorme cantidades de recursos económicos, como las avenidas Circunvalación y Segunda Línea del Metro”, señaló la agrupación.
En ese mismo sentido, el Movimiento denunció que el hospital Jaime Oliver, en Barahona, recibe una subvención (cuatro meses de atraso) de RD$2.1 millones. El hospital Doctor Musa, en San Pedro de Macorís, tiene una subvención de RD$2.3 millones (tres cuotas atrasadas) y una deuda de RD$6 millones.
En La Romana, el hospital Francisco Gonzalvo recibe RD$1.4 millones y exhibe una deuda con sus suplidores por RD$20 millones. El Alejandro Cabral, en San Juan de la Maguana, recibe una subvención de RD$1.2 millones, dinero que hace tres meses que no entra.
Mientras, el hospital Taiwán de Azua tiene una subvención de RD$4.3 millones, que no recibe hace tres meses. El hospital general Santiago Rodríguez lleva tres meses que no le dan la asignación de 827 mil 900 pesos, por lo que ostenta una deuda acumulada de RD$4 millones.
El Ramón Matías Mella, en Dajabón, recibe RD$700 mil, pero hace tres meses que no los obtiene. Muetra una deuda de RD$4 millones.
El hospital Nuestra Señora de Regla, en Baní ,tiene asignado RD$2.8 millones, recursos que hace tres meses que no llega. En la capital, el Francisco Moscoso Puello tiene una asignación de seis millones de pesos (en este centro médico no se especificaron las deudas ni los atrasos).
Frank Pacheco
Z-101 Digital
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