El comunicador Álvaro Arvelo Hijo le rompió unos documento en vivo, en el aire, al comentarista Pablo Ross; dichos papeles que, supuestamente eran un informe del agregado jurídico de la embajada de los Estados Unidos, terminó en el lugar correcto: ¡el zafacón!. Este pasquín era supuestamente un memorandum sobre narcotraficantes, lavado de activos y personas ligadas a Hipólito Mejía.
El informe es del 4 de septiembre de 2002, y el comunicador Pablo Ross, pretendía aconsejar al entorno del candidato presidencial del PRD sobre las malas compañías. Arvelo Hijo, haciendo un llamado al director de la emisora y al propietario, se opuso a su lectura y acusó a los Vincho's Castillo de estar detrás de revivir documentos de hace diez años para hacer daño gratuito. El supuesto caso ocurrió en Panamá y supuestamente, en este lugar revivió hace dos meses.
Según Ross, la información se la ofreció un supuesto periodista dominicano que está escandalizado, preocupado por lo que podrían hacerle a la imagen del candidato del PRD, el nombre de este informador es supuestamente Antonio Pérez, que supuestamente vivía en Panamá y ahora, supuestamente vive en España.
Hace dos días escribí este artículo que los invito a leer o releer para que ustedes, estimados visitantes, entiendan que en este medio DLRD no mentimos ni manipulamos informaciones a nuestros lectores, lea "Cúpula del régimen traza estrategia diábolica".
La mente perversa que dirige todas las cosas malignas que han sucedido en los últimos 8 años, aprovecha su ausencia para tirarle los perros del Estado a la oposición, mientras el cínico candidato del régimen dice que no hay campaña sucia, le llama carterista a su oponente.
Existe la sospecha bien fundada de que el comunicador Pablo Ross inventa y miente sobre informaciones falsas; basado en la línea que le trazan desde la DIAPE y los halcones del régimen, una aleación peligrosa.
Alvaro Arvelo Hijo no es santo de mi devoción, hoy, actuó como un hombre de verdad, no permitió que usaran el programa el "Gobierno de la Mañana", para rastrerías politiqueras del sector que acusa el señor Arvelo.
Si yo hubiese estado en su lugar hubiese hecho lo mismo, el que quiera calumniar, mentir y enlodar reputaciones, que monte su emisora y su programa. Luego dicen los oficialistas que en la Z-101 coartan la libertad de expresión, ¡oh! ¿Y quién va a permitir que tomen su empresa para acusar a un candidato puntero en todas las encuestas serias de estar ligado al narcotráfico y al lavado de activos; con un libelo sobre la base de un expediente de hace diez años; a 39 días de las elecciones?
Yo como mujer no incentivo la violencia, esta vez le digo al señor Arvelo Hijo: ¡Bien hecho!
Al señor Ross lo invito a que piense bien lo que vaya a decir en la Z-101, una emisora que se escucha en el mundo entero no puede usarse como si fuera una tertulia de tragos en un bar de mala muerte.
Jeannelle Koss / Desde La República Dominicana
Fuente: El Gobierno de la Mañana / Z - 101
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