Stéphane Richard, presidente director general de la teleoperadora Orange. Foto: AFP
Supuestamente ya fue vendida Orange Dominicana
Si Usted me hubiese dicho el día 9 de junio de 2013 que en dos meses la compañía Orange Dominicana estaría en la situación difícil en que se encuentra hoy día, le hubiese dicho que Usted estaba loco, pero la realidad que vive esta inversión multimillonaria francesa de telecomunicaciones es penosa.
Hasta ese día, Orange Dominicana mantenía una imagen de empresa co-líder del mercado (38.4% del mercado dominicano) de telecomunicaciones en República Dominicana. Productos con tecnología de punta, puntos de ventas con diseños hermosos, soporte técnico y un personal de atención al cliente que hacían la envidia de la competencia.
Tan popular es el personal de Orange Dominicana y sus tiendas que en las encuestas laborales de los últimos tres años realizadas en el país, la mayoría de los jóvenes tenían a esta empresa como el lugar que preferían para conseguir un empleo.
Antecedentes
- En septiembre de 2012, nadie sabe de dónde y contando con quién, Orange Dominicana se destapó con una publicidad masiva donde ofertaban la tecnología 4G LTE, promoción que los técnicos calificados en la materia consideraron engañosa ya que el país no contaba con la capacidad técnica para este servicio.
- En enero de 2013 entró en vigencia la Reforma Fiscal sometida por el gobierno del presidente Danilo Medina que elevó el Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrizalizados (ITBIS) de un 16% a un 18%. Ese 2% violó las reglas del juego frente a la inversión extranjera. Orange Dominicana se había quejado anteriormente de los abusivos impuestos a las telecomuncaciones que existían en RD, un escandaloso 28%. Con la reforma fiscal aumentando el ITBIS en un 2%, la carga fiscal es de un 30%. Los usuarios pagan al Estado depredador RD$30.00 de impuestos de cada RD$100.00 que utilizan del servicio de telecomunicaciones.
- Unos meses atrás, INDOTEL derrogó unos artículos que quitaban obligaciones a los usuarios a estar atados por periodos de tiempo etipulados con una operadora telefónica, Orange Dominicana aprovechó esta coyuntura y violó planes de bajos costos que había ofrecido a sus clientes, llevándolos inconsultamente a pagar planes más caros. Esto creó desconfianza y molestias entre sus abonados y una estampida hacia otras empresas de telefonía.
10 de junio de 2013
- La noticia recorrió el mundo. El presidente director general de Orange, Stéphane Richard, es detenido en París, Francia, para ser investigado por el 'Caso Tapie', cuyo nombre proviene del empresario Bernard Tapie. Este apresamiento de la cabeza de Orange erosionó la imagen mundial de la compañía.
16 de julio de 2013
La agencia de noticias REUTERS informó que la inversión de mil doscientos millones de dólares de Orange Dominicana estaba en venta. Decía REUTERS que el dinero sería utilizado para pagar deudas, agregaba además que ya el mercado dominicano no era estratégico (pagar 30% de impuestos a un Estado depredador y que no respeta las reglas del juego acordadas con el inversor extranjero no está en los planes estratégicos de ninguna empresa que se respete y cumpla las leyes).
Los rumores
Fuentes de entero crédito informaron a DLRD que Orange Dominicana ya fue vendida, lo que no hemos podido confirmar es la veracidad de que fue comprada por América Móvil, compañía del multimillonario mexicano Carlos Slim. El señor Slim es el actual propietario de Claro Dominicana, de ser cierto lo de la compra de Orange Dominicana por este, convertiría su operación telefónica local en un monopolio, ya que Claro Dominicana tiene un 52% del mercado de las telecomunicaciones en el país, que sumado al de Orange llegaría a más del 90% y eso está prohibido por Ley en República Dominicana.
Incertidumbre
Como es lógico los operadores de las franquicias de Orange y los empleados están en pánico, no tienen información certera de qué está pasando y si sus inversiones y empleos están en peligro, desde hace dos meses no reciben equipos nuevos competitivos y la publicidad no surte el efecto deseado.
Conclusión
Jamás en los años de ejercicio profesional que llevamos habíamos visto a una marca que podría llamarse líder o co-líder, derrumbarse de manera tan estrepitosa y en tan corto tiempo como Orange Dominicana (Ni siquiera la empresa italiana de productos lácteos Parmalat en su momento). Otras empresas debería mirarse en el espejo de todos los errores cometidos por Orange para que no les suceda lo mismo. Da pena y tristeza ver los locales de esta empresa vacíos, cuando hace apenas 60 días eran dignos de admiración y causaban recelos en la competencia.
Jeannelle Koss / Desde La República Dominicana