Desde hace días DLRD tiene publicado en su columna lateral derecha la promoción de la nueva especie creada en los últimos nueve años y tres meses por los gobiernos peledeístas. El Dominicus Limbus. Más que provocar risa, este cartel es realmente una gran tragedia que apena. La cleptocracia gobernante pudo ocultar este engendro durante muchos años, ya son tantos que es imposible, no hay manto que cubra tanta corrupción, degeneración y sus consecuencias en los ciudadanos. No hay dominicano que no tenga conocimiento del drama familiar que estamos viviendo, divorcios, hogares destruidos, familias enteras arrimadas en las casas paternas. Descenso del nivel y la calidad de vida, sin acceso a las clínicas y a las medicinas. Comiendo porquerías y agotando 24 horas diarias de vagancia, no hay empleos, no se crean trabajos de calidad para las diferentes categorías de mano de obra, empleados y ejecutivos. El expresidente Leonel Fernández se gastó cincuenta millones de dólares conociendo el mundo en doce años de Gobierno, cada vez que regresaba aseguraba que se crearían miles de empleos, que la inversión extranjera sería masiva y que todos los recursos que costaban esos periplos presidenciales, de esos abusivos y costosos bacanales, se compensarían con todo lo que él nos traía a la nación. Todo fue un sueño, nunca llegaron esas inversiones ni esos empleos.
El Dominicus Limbus es la obra maestra de la cleptocracia gobernante desde 2004, es el resultado de las conceptualizaciones y de los nuevos paradigmas del más perverso de todos los dominicanos que se recuerde y eso hay que tenerlo presente siempre, porque la justicia algún día tendrá que pasarle factura a los responsables de la calamidad social que está sufriendo la República Dominicana actualmente.
Jeannelle Koss / Desde La República Dominicana
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