¿De qué le vale trabajar de 7 de la mañana hasta las doce de la noche defendiendo la democracia y combatiendo la delincuencia?
¿De qué le vale tener un equipo de primera categoría, inteligente, capacitado y coherente para luchar contra los traidores a los principios morales y éticos?
¿De qué le vale que invierta en abogados para defender a sus empleados de la furia de los capos nacionales?
¿De qué le vale?
- De qué le vale si tiene a un sinvergüenza contradiciendo a todo el que hable, interrumpe, rebate y se va contracorriente para buscarse el peso de las "medicinas", los viajes de vacaciones al extranjero, los fines de semana al interior y los pesos para mañana, por si acaso.
¿De qué le vale?
- Entiéndalo, es un degenerado que no cree en nada ni en nadie, ni siquiera en usted. Es el más vil de todos los canallas conocidos, solo comparable al diplomático, pero a diferencia del delincuente aquel, este es su empleado. Un cáncer en su empresa que no respeta a sus ejecutivos, a sus empleados, a sus oyentes y mucho menos a usted y a su familia.
¿Es usted un guebón? - No se da cuenta usted que todo lo que usted hace en beneficio del país este delincuente que tiene bien ubicada económicamente a su familia y que le saca a usted una buena millonada anualmente, leyendo noticias ajenas como si fueran propias y repitiendo todo los días lo mismo que se aprendió cuando era un alcohólico empedernido, está trabajado para sus intereses personales echando por el suelo la moral de su empresa y de sus compañeros.
¡Chico! No sea tan pendejo, mande para su casa a ese comemierda a negociar y que sus profesionales (muy buenos por cierto) puedan desarrollar su trabajo tranquilamente. ¿De qué le vale todo esto Don?
Luis Del Monte / Desde La República Dominicana
1 comentario:
¡Eso es lo que se llama un galletón sin manos! Sí, coño, ese sabelotodo es un escollo... mándenlo a freír tuzas en miao... que se vaya con su lengua de acetileno a otra comarca... el infierno quizás...
Isaías
Publicar un comentario