La mala imagen del Congreso fue ratificada por un estudio demoscópico dado a conocer por la Fundación Global, del expresidente Leonel Fernández. Siete de cada 10 ciudadanos, lo que equivale al 70%, dicen que no tienen confianza en las cámaras legislativas. La elevada desaprobación, que coincide con una evaluación del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), es para que senadores y diputados se preocupen, pero la realidad es que esa percepción a estos los tiene sin cuidado.
Entre las causas se citan que los legisladores inflan las expectativas de la ciudadanía y recurren al clientelismo, sin que se descarten los escándalos de corrupción que se denuncian en torno a la labor de los senadores y diputados. Además de los irritantes privilegios de que disfrutan.
El estudio sobre la imagen de los congresistas que acredita la Fundación Global fue realizado por el Latinobarómetro. Al margen de su rigor técnico lo cierto es que el resultado sintoniza con la percepción que se tiene de los congresistas. El criterio debería servirles siquiera para reflexionar sobre la necesidad de adecentar la imagen que proyectan las cámaras legislativas.
Cójanlo
El Nacional
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