Miembros del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza y Terrestre (Cesfront) vigilan a un grupo de haitianos indocumentados capturado a las 2:10 de la madrugada del viernes en la comunidad de Cayuco, a ocho kilómetros de Dajabón, durante uno de los operativos que realizan las autoridades para frenar la inmigración ilegal.
Haitianos burlan vigilancia militar
DAJABÓN. Miles de haitianos indocumentados, muchos de ellos mujeres y niños menores de diez años, continúan arribando a territorio dominicano con el propósito de quedarse, pese a la “Operación Escudo” dispuesta por el Ministerio de Defensa. La oleada de haitianos no se detiene pese a los esfuerzos del Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza (Cesfront), de la Dirección General de Migración, del Ejército y la Armada de la República Dominicana, y del Departamento de Operaciones e Investigación Fronteriza (Doif).El arribo de indocumentados del vecino país es de tal magnitud, que Tomás Delgadillo, encargado de Migración en Santiago, se vio obligado a trasladarse a esta ciudad para coordinar directamente con los cuerpos armados, los operativos de contención de los inmigrantes haitianos.
Asimismo, el general Carlos Aguirre Reyes, comandante del Cesfront, tuvo que establecerse por varios días en esta ciudad, donde supervisó de manera personal las labores de vigilancia de los soldados que comanda el mayor Santiago Gómez, quien apenas había dormido nueve horas en los últimos tres días.
Los soldados comandados por Gómez se habían incautado en las últimas 72 horas de más de 70 motocicletas, con el número de chasis alterado o borrado, usadas por dominicanos para transportar indocumentados.
El ministro de Defensa, teniente general Máximo William Muñoz Delgado, reforzó la seguridad en la zona fronteriza norte con más de 300 soldados, a fin de contener la oleada de haitianos.
Los operativos
En los últimos cinco días, los soldados del Cesfront, los inspectores de Migración y los miembros del Doif y del Ejército, detuvieron y repatriaron más de mil extranjeros que entraron al territorio nacional de manera ilegal cruzando el río Masacre, tras lo cual se escondieron en montes y en algunas edificaciones.
Cuarenta y tres de esos inmigrantes ilegales, entre ellos 14 mujeres, fueron descubiertos en la azotea de un edificio de tres niveles donde llevaban doce horas escondidos. Todos fueron repatriados.
El pasado viernes a las 2:10 de la madrugada 130 inmigrantes indocumentados fueron capturados en un matorral en la comunidad La Clavellina, a ocho kilómetros de esta ciudad, cuando esperaban ser trasladados a La Vega.
En el grupo fueron descubiertas 14 mujeres, entre ellas una joven de 20 años, madre de un niño de dos años que la acompañaba, al que no le había dado de comer en las últimos 30 horas.
El niño, envuelto en una manta blanca, para protegerlo de las bajas temperaturas de 19 grados Celsius, fue examinado por una médico militar para asegurarse de su estado de salud.
Mientras que el viernes a las 10:20 de la mañana otro grupo de 37 haitianos indocumentados fue descubierto y capturado en el sector La Aviación, a tres kilómetros de esta ciudad.
En ese grupo también fueron capturadas varias mujeres, entre ellas una joven de 27 años, madre de una niña de cuatro años, que llevaba 36 horas escondida en el monte, sin comer ni dormir adecuamente, rodeada de desconocidos.
¿Cómo llegan?
Un indocumentado haitiano señalado como el “capote” o guía de sus compatriotas, reveló que muchos de ellos pasan el río Masacre y luego pagan entre tres y cinco mil pesos a motoconchistas dominicanos para que los trasladen a lugares seguros de donde puedan seguir hacia Santiago, La Vega, Moca y otras poblaciones.
Luego de esta travesía vuelven y pagan entre cuatro y cinco mil pesos a otros transportistas, generalmente camioneros, para llegar a su destino final.
El indocumentado, cuya mujer escapó con un motoconchista, se quejó de que muchos dominicanos los estafan y violan las mujeres haitianas.
Aguirre Reyes
El general Carlos Aguirre Reyes, comandante del Cesfront, calificó como normal para la época, el volumen de haitianos que regresa a República Dominicana, luego de pasar Navidad y Año Nuevo en su país.
Aguirre Reyes manifestó que muchos no quieren pagar los impuestos que cobra la Dirección General de Migración, y que otros tratan de colarse por no tener ningún documento.
El oficial resaltó el papel del Cesfront, del Ejército, la Armada del Doif y de las autoridades de Migración en la región fronteriza.
Pese a ser un oficial general, Aguirre Reyes comanda personalmente los operativos e insiste en un trato digno a los indocumentados haitianos que son detenidos.
“A pesar del grave problema de la inmigración ilegal, aquí no se maltrata a nadie”, aseguró.
EL DATO
Oleada masiva
Los haitianos indocumentados que penetran al territorio de República Dominicana, arriban en grandes grupos, dirigidos por un “capote”, que conoce las rutas y los “coyotes” o guías que son dominicanos.
Ruddy Germán Pérez
r.german@elnacional.com.do
El Nacional
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