Hipólito Mejía.
Hipólito Mejía
El expresidente Hipólito Mejía declaró que en aras de la unidad del Partido Revolucionario Dominicano está dispuesto a perdonar a los que traicionaron a esa organización en las pasadas elecciones del 20 de mayo de 2012. El exmandatario puede perdonar a quien quiera, quienes no lo harán así será el pueblo dominicano que confió sus preferencias a su candidatura y que por su incapacidad, ineptitud y payasadas tiró por la borda.
Mientras este pueblo apoyaba incondicionalmente a Mejía para sacar a la cleptocracia gobernante de Palacio Nacional, siendo puntero en todas las encuestas para diciembre de 2011, éste, se dedicó a mostrarse públicamente con los responsables de que no fuese reelegido en 2004. Se burló de las empleadas domésticas, amenazó con trancar al gobierno completo cuando ganara, advirtiendo que no habría "borrón y cuenta nueva" y ofreció las tarjetas de subsidios a los pobres en colores rosadita, verdecita y la morenita, todo esto pudo haberlo hecho después de ganar y no amenazar antes de los comicios.
En un hotel fue maltratado por su escolta un periodista, la misma funesta escolta que lo metió en serios problemas durante su mandato, bromeó con el presidente de Estados Unidos Barack Obama, a la Suprema Corte de Justicia la amenazó, a los santiagueros los llamó arribistas y oportunistas, y como si fuera poco dijo que no pagaría las deudas del Gobierno, actuaciones que solo las hace sin haber pasado las elecciones un candidato iletrado, incapacitado para ser Presidente de una Nación.
En pocas palabras todo el dinero invertido, todo el esfuerzo que hizo este pueblo para darle la victoria a Hipólito Mejía fue mierdeado por el candidato, quien se apuñaleó para sí solo todos los recursos recaudados por los mecenas; dejando a todos los componentes de la campaña electoral sin recursos y al final, a la hora de la verdad, el supuesto "guapo de Gurabo", se comportó como un verdadero pendejo, plumeado, aceptando una derrota apoyada en 200 mil millones de déficit fiscal a costillas de las arcas del Estado, que terminamos pagando los ciudadanos con la séptima reforma fiscal peledeísta.
Miguel Vargas Maldonado
El "presidente del PRD" (así, con minúscula) es un traidor, como traidor lo ven los ciudadanos y no hay mucho que abundar sobre un político traidor. Socio de Leonel Fernández, comerciante sin escrúpulos de la política que no vale dos centavos como candidato de nada; jamás conseguirá el perdón de los que apoyaron al PRD para salir de la pesadilla morada.
Los "ministros de Hipólito"
Viví en carne propia la soberbia y el maltrato de los que se creían dueños de ministerios y altos cargos del supuesto gobierno de Hipólito Mejía. Una caterva de ancianos en edad de estar retirados, meses antes de las elecciones era imposible verlos, no tomaban ni devolvían llamadas telefónicas, asqueroseando a los que les dábamos la mano gratuitamente, sin esperar nada a cambio, creyéndose que ya el gobierno era de ellos.
El PRD
Ya ni siquiera a los perredeístas les importa ni lo que haga Hipólito ni lo que haga Miguel. Se acabó la magia, los dominicanos que estamos decididos a finalizar con esta dictadura democrática, con esta cleptocracia, no contamos ni en sueños con el PRD, ni con Mejía ni con Vargas Maldonado.
Don Hipólito Mejía puede perdonar a quien quiera, nosotros no. Los dominicanos para el 2016 estamos buscando a un hombre honesto, sin manchas en su pasado, preparado, con prestigio y guapo de verdad, que enfrente de frente a los capos que desde 2004 han secuestrado a la República Dominicana, y entre los aspirantes no están ni Miguel Vargas Maldonado ni Hipólito Mejía, eso puedo asegurarlo.
Luis Del Monte / Desde La República Dominicana
No hay comentarios:
Publicar un comentario