VISITANTES

VISITANTES
DOMINICANOS SOMOS. Vea las más leídas de la semana en la columna lateral derecha de este blog. / DLRD, desde el 1ro. de septiembre de 2005 en la W.W.W.

viernes, 22 de enero de 2016

Cleptocracia gobernante toma préstamos para pagarlos con impuestos a los combustibles


Las gasolinas suben 200% de la Refinería a las estaciones
Durante toda la semana comercial que concluye hoy, el galón de gasolina premium estuvo saliendo de la Refinería Dominicana de Petróleo a RD$59.15 y vendiéndose al público a RD$177.00.Un comportamiento similar ha tenido la gasolina regular. Ambas categorías de gasolinas llegan al público consumidor con aproximadamente un 200% más cara que a como son despachadas por la Refinería.

Impuestos, márgenes de comercialización y comisión de transportistas se encargan de cambiar la ecuación de precios de los combustibles. En la cotización actual de las gasolinas, el costo de paridad de importación es sólo una tercera parte del precio final que paga el público.

Impuestos superan precio de paridad

En los dos tipos de gasolinas que se comercializan en el mercado dominicano, los impuestos cargados por galón superan el llamado precio de paridad de importación, que es el valor al que salen de la Refinería Dominicana de Petróleo los diferentes hidrocarburos.

En términos contables, el precio de paridad representa el costo de venta de la Refinería, por lo que el monto asignado a cada derivado de petróleo incluye los beneficios de la empresa.

Si no existieran impuestos de por medio, la diferencia entre el precio de paridad de importación y el final que paga el público, la diferencia mayor en el caso del combustible más caro, la gasolina premium, sería de RD$36.50.

Los márgenes de comercialización de los distribuidores, detallistas y la comisión de los transportistas suman, en el precio actual de la gasolina premium, RD$38.63 por cada galón. Pero el gran salto está dado por los impuestos cargados, que en el caso de este combustible, es de RD$81.32. Este monto está compuesto por RD$71.85 establecido en base a la Ley 112-00 de Hidrocarburos, y RD$9.47 por el impuesto ad valorem fijado por la Ley 405-06 de Reforma Fiscal.

En el precio vigente hasta hoy para la gasolina premium, el costo de paridad por galón es de RD$59.15 y el de venta final al público es RD$177.00. De la Refinería al público, los impuestos y los márgenes y comisión le agregan un 199.23 por ciento del valor que finalmente paga el público.

En el caso de la gasolina regular, la situación es similar. Al día de hoy, el precio paridad de importación es de RD$53.88 y el de venta al público es RD$159.60. El fisco y los distribuidores y transportistas le agregan RD$105.72 por cada galón, equivalente a un 196.21 por ciento.

La influencia también se da para los dos tipos de gasoil que se comercializan en el país, aunque en menor dimensión, debido a que el nivel impositivo es menor que en las gasolinas. Los impuestos generan la mayor parte de la diferencia de precio que se genera en el trayecto de la Refinería a las estaciones de expendio.

En el caso del gasoil regular, cuyo precio de paridad es hasta hoy de RD$52.71 y el de venta, RD$119.00, el público paga un costo en las estaciones superior en un 125.76% a como sale de la Refinería de Petróleo. La carga de impuesto es de RD$36.50 por galón. En el tipo óptimo, la carga impositiva es de RD$45.58 y la diferencia entre el precio de paridad y el de venta es de 131.4%. Los combustibles, excepto los destinados a generación eléctrica, están gravados por dos leyes impositivas, una que creó un impuesto específico, que se aplica en base a volumen, y otra que grava el valor.

Rendimiento impositivo del ad valorem se reduce

Por la característica ad valorem, los ingresos del Gobierno basados en el impuesto creado por la ley 495-06 han estado bajando su rendimiento, porque los precios internos de los hidrocarburos han estado disminuyendo. No obstante, los impuestos específicos se mantienen como un gran componente del costo de los combustibles. En el caso actual de la gasolina premium, los impuestos superan en un 21.47% (RD$81.32 versus RD$59.15).


Héctor Linares
elCaribe

Foto embajador EE.UU. en piscina provoca incidente con Diario Libre

Wally Brewster, su esposo Bob Satawake y un grupo de amigos en la piscina de la residencia de la embajada de los Estados Unidos. (Foto: Bob Satawake)

Todo el mundo utiliza y reproduce lo que se publica en la Internet
La publicación de esta imagen subida a la red por el esposo del embajador de Estados Unidos en RD, la cual fue tomada de las redes sociales y reproducida por Diario Libre, ha causado un incidente entre "la Embajada" y este periódico.

Al embajador Brewster lo hemos respaldado en casi todo desde antes de su llegada al país, esta vez se nos hace difícil, la libertad de expresión y de prensa son innegociables en el siglo XXI. Deseamos que Wally y el señor Pellerano se tomen un té y pongan fin a ese malentendido por el bien de ambos.

Diario Libre no se merece un castigo por motivos personales, el señor Brewster tiene otras batallas más importantes que enfrentar en los próximos meses.



Desde La República Dominicana

Tienen el jubón descosido y se les ven las nalgas


Las más desiguales elecciones de nuestra historia
Después de la muerte de Trujillo, las elecciones más desiguales e inicuas que se han celebrado serán las del próximo 15 de mayo. Cuando Jean Jacobo Rousseau escribió “El contrato social”, lo que hizo fue sustituir el Edicto regio, las bulas y Cédulas reales; todo ese aparato nobiliario en el que, por la gracia divina, se sustentaba el poder de la nobleza. Lo que Rousseau proclamó fue la ley como expresión de la voluntad del contrato, marcando una mediación en lo referente a la interactuación entre razón e historia. Todo eso que llamamos “Democracia” en la cultura occidental, no es más que esa ilusión roussoniana, según la cual el Estado moderno es una “representación” de todos los ciudadanos.

Para que esto se cumpla la sociedad civil debe apartarse de sí misma en cuanto sociedad civil, mediante un acto político que es una completa transustanciación. Dice Rousseau: “Enajeno mi libertad para participar en la soberanía”. De esta manera, el verdadero centro del contrato social, es la fórmula de la soberanía de la voluntad general, que se realiza mediante el voto. El pobre Rousseau creía que el voto era la expresión de una voluntad no condicionada. Un sujeto sitiado por la miseria, la ignorancia o la violencia estructural, no se puede decir que sea libre. Ejercer el derecho al voto, votar en las elecciones dominicanas no es un acto de la voluntad libérrima del sujeto. Incluso en las elecciones de mayor nivel de transparencia que ganó Juan Bosch en el año 1962, las mediaciones estructurales influyeron y actuaron como mecanismo de secuestro de la voluntad. El uso de los fondos públicos, la ignorancia, la miseria, la incertidumbre económica, la corrupción y el despotismo, desnaturalizan la concepción roussoniana del acto de votar.

Pero la asimetría de estas elecciones es única. El candidato presidente comenzó por reventar a su propio correligionario. Leonel Fernández fue cercado, humillado, atemorizado. La primera piedra contraria al espíritu democrático fue impedirle a Leonel Fernández participar, y traer a Quirino, como el último ariete de la intimidación. Después, desperdigó el núcleo duro de legisladores que apoyaban al exmandatario, y compró sin ningún pudor la modificación constitucional que le permitiría repostularse.

Armó con los fondos públicos un tinglado espectacular de corifeos provenientes del amplio mercado de partidos y partiduchos cuya característica histórica ha sido depredar el Estado. Maneja casi el 85% de los fondos que se dedican a la celebración de las elecciones, y dispone a su antojo de los programas asistenciales del Estado, y del presupuesto público. Además, el PLD es un partido cuya financiación es estatal. 28 mil dirigentes medios cobran en las nóminas públicas, prorrateados en ministerios y direcciones generales. Y la inversión en promoción institucional, y personal del candidato presidente, alcanza algo más de siete mil millones de pesos. Sólo en la promoción de las “Visitas sorpresas” se han invertido más de dos mil millones. Y para colmo, los árbitros del proceso son militantes del partido oficial, o súcubos avispados que se han vendido al mejor postor. Tanto la Junta Central Electoral, como el Tribunal Superior Electoral, predican “imparcialidad” mostrando el trasero, y como el falso caballero, tienen el jubón descosido y se les ven las nalgas.

No podemos confundir el desencanto con la verdad. Cuanto he descrito se despliega todos los días ante nuestros ojos. Las más desiguales y abusivas elecciones nacionales en este país serán las del próximo 15 de mayo. El abuso de poder lo ha colmado todo. Si este fuera un país de verdad, la moderación burguesa estuviera espantada, porque esa ilusión roussoniana del voto imagen del ejercicio de la libertad individual, sirve ahora como refugio de la corrupción y la impunidad más descarada. Si yo tuviera tiempo y dinero me diera una vueltecita por Francia para echarme unos párrafos con el combativo Rousseau, y hasta lo traería de vuelta al mundo de los vivos; para que vea éste espectáculo, esta pantomima de la libertad, este sudario de la gloria, este país diciendo madrigales a pesar de su miseria ancestral y su despojo; estrenando en cada vuelta circular de la historia un tirano celeste, un iluminado, un cínico frío anunciando su destino. ¡Oh, Rousseau, amigo mío!


Andrés Luciano Mateo
Hoy

jueves, 21 de enero de 2016

El 15 de mayo no vote por sinvergüenzas




sinvergüenza

1. adj. PícarobribónU. t. c. s.
2. adj. Dicho de una personaQue comete actos ilegales en provecho propioo que incurre en inmoralidadesU. t. c. s.

3. f. Perú. Desfachatezfalta de vergüenza.

Portada El Nacional 21-1-16 

El crimen nos ha abacorado!


Arte con sordina
Hay quienes afirman que, bajo regímenes opresivos o dictatoriales, los artistas suelen ser más prolífi cos que cuando viven en libertad. Que los abusos, miedos y carencias, son caldo de cultivo para desarrollar obras críticas que, aunque no se publiquen por razones obvias, pueden filtrarse clandestinamente o aguardan a la espera del clarín de libertad que les permitirá llegar a manos de los que deberán expresar gestos de recepción para los autores.

Otros sostienen que, bajo tales condiciones, las expresiones artísticas suelen caer en círculos viciosos y hasta en el panfleto, cosa no criticable (desde mi modesto punto de vista), dado que el hombre, no importa su estadio cultural o social, debe honrar el compromiso con su filosofía, principios o ideología.

Ahora bien: ¿Qué ocurre cuando los frenos no son autoría expresa del régimen gobernante, sino generados por la descomposición social? He visto que hoy, muchos artistas e intelectuales nacionales expresan temor de salir a las calles, influenciados por experiencias de terceros o familiares cercanos que narran asaltos y asesinatos en cualquier lugar de la geografía nacional. La delincuencia los ha arrinconado, marginado, limitado (tal a todos), salvo los que siguen arriesgando la vida con el solo hecho de salir a las calles. ¿Provocará esa condición una mejor producción artística? Tengo mis dudas. Miguel Houellebecq, el novelista francés, afirma: “Ninguna cultura del espíritu ha sido capaz de desarrollarse jamás en sociedades con un alto índice de delincuencia.

Simplemente, porque la seguridad física es la condición del pensamiento libre, y ninguna reflexión, ninguna poesía; ningún pensamiento mínimamente creativo ha logrado nacer nunca en un individuo que tenga que preocuparse de la supervivencia, que tenga que estar siempre en guardia”. La dictadura o la degeneración de la sociedad, obligan a “clandestinar” las trompetas, pero la descomposición les pone sordinas, impidiendo el flujo melódico en toda su intensidad. ¡El crimen nos ha abacorado!


Freddy Ortiz
De Variados Temas
Listín Diario

miércoles, 20 de enero de 2016

César Medina puso en evidencia a Lon y a Noticias SIN

Su excelencia, embajador plenipotenciario ante la República de Panamá, César Medina, quien reunió con el Presidente a un grupo de periodistas en la inauguración de su embajada en Ciudad Panamá, supuestamente estos comunicadores pasan a formar parte de la plataforma mediática del PLD. El Cuarto de Guerra Mediática.


Es muy boca suelta
Cuando la nación dominicana leyó los elogios que César Medina derramó sobre las figuras del estimado periodista Miguel Guerrero (Lon) y de Noticias SIN, las antenitas de vinil polidireccionales de los más aguzados se alteraron.

Miguel Guerrero es libre de irse políticamente con quien estime más conveniente, los mismo que Alicia Ortega y su esposo, Fernando Hasbún.

El problema ahora es de credibilidad, ni Alicia Ortega, ni Fernando Hasbún, ni Noticias SIN ni LON; tienen el peso en sus opiniones que tenían antes de el viaje de los "periodistas" con el Presidente a Panamá.

Que tengan suerte en su aventura junto a la cleptocracia gobernante.



Desde La República Dominicana

Y por ahí viene la encuesta Gallup - PLD


Van presos todos los implicados en la barbarie 2004 - 2016
La cleptocracia gobernante, la mafia corrupta que se apoderó del Estado dominicano en 2004 solo está calentando el brazo con sus "soportes" de manipulación mediática para continuar depredando a la nación, por ahí viene la encuesta Gallup - PLD a decirles a los criollos que Danilo Medina es la virgen de La Altagracia con bigotes y calva.

El señor Acevedo, con su cara de monaguillo de iglesia de pueblo fronterizo pedirá perdón por publicar que los ladrones que nos desgobiernan tienen un 60% y la oposición un 19.99%.

El guión es el mismo que en 2012 cuando estos bandidos publicadores de encuestas fueron el pie de amigo para justificar el robo de las elecciones a sus contrarios.

Estamos en 2016, van para fuera del gobierno y caerán presos todos los responsables de la fiesta de 12 años, realizada sobre el sufrimiento de todo un pueblo. Incluyendo a los manipuladores de opinión pública.




Jeannelle Koss / Desde La República Dominicana

La credibilidad en la encuesta MP Mark Penn de Bernardo Vega



Un espacio pagado del Gobierno, una publicidad como cualquier otra.




DLRD

De esto viven los cleptócratas de la cleptogracia gobernante





Samuel Priego
Diógenes y Boquechivo
Diario Libre

martes, 19 de enero de 2016

Carta Pastoral Iglesia Católica fustiga cleptocracia gobernante


Corrupción e inseguridad preocupan a la Iglesia Católica al igual que a la Iglesia Evangélica

"SEAN MISERICORDIOSOS COMO SU PADRE ES MISERICORDIOSO"
Muy queridos hermanos y hermanas en el Señor, nos dirigimos a ustedes sintonizando con el sentir de la Iglesia en el marco del año dedicado a la Misericordia por el Papa Francisco. El actual Pontífice nos presenta este año jubilar con las siguientes palabras: “Hay momentos en los que de un modo mucho más intenso estamos llamados a tener una mirada fija en la misericordia para poder ser nosotros mismos signo eficaz del obrar del Padre. Es por eso que he anunciado un Jubileo Extraordinario de la Misericordia como tiempo propicio para la Iglesia para que haga más fuerte y eficaz el testimonio de los creyentes”[1]. Esta Carta pastoral tiene como finalidad llevarles nuestro aliento y cercanía de pastores a todos aquellos hermanos que se sienten abandonados, rechazados, faltos de atención y acogida en nuestra sociedad dominicana. Dirigimos este mensaje a todas las personas de buena voluntad para hacerles la misma invitación que hiciera Jesús a sus discípulos en el Sermón del Monte: “Sean misericordiosos como su Padre es misericordioso” (Lc 6,36). Invitamos a todos a dar una mirada a la realidad que nos circunda bajo la óptica de la misericordia de Dios y responder a los males que la “desfiguran” con la aplicación de la “medicina” del amor compasivo y misericordioso del Padre. 2. ¿Qué entiende la Biblia por misericordia?

Las Sagradas Escrituras nos presentan la misericordia como uno de los atributos esenciales con que Dios más ha favorecido a su pueblo a lo largo de la historia salvífica. De hecho Dios se revela a Moisés como un “Dios compasivo y misericordioso, lento a la ira, rico amor y fidelidad” (Ex 34,6). La actitud de Dios-Padre ante la infidelidad del pueblo de Israel a su alianza es ser paciente y compasivo, perdonándolo y acogiéndolo con infinito amor y ternura, dándole la oportunidad de convertirse y regenerarse de sus faltas.

El término misericordia viene de dos palabras latinas miserere que significa pobre y cor-cordis que significa corazón. Una persona misericordiosa es aquella que tiene un corazón sencillo y humilde que puede compadecerse de los demás.

El Antiguo Testamento usa dos términos para hablar de misericordia: rehamîm que describe el apego de una persona hacia otra, como el amor de entraña que siente una madre por su hijo y hesed que significa firmeza, fidelidad, decisión. La Biblia traduce estas dos palabras de diferentes formas como: misericordia, amor, ternura, piedad, comprensión, clemencia, bondad.

El pueblo de Israel hizo experiencia de este amor misericordioso de Dios en Egipto, cuando suscitó a Moisés para librarlo del yugo opresor: “He visto la opresión de mi pueblo, he oído sus quejas, me he fijado en sus sufrimientos” (Ex 3,7).

Israel no pudo mantener este pacto de fidelidad a la Alianza y la rompió varias veces, sin que ello fuera causa para que Dios se olvidara de su promesa. Siempre tuvo compasión de su pueblo. El mejor ejemplo se da con la misericordia que tuvo con David, a quien quiso y perdonó con infinita misericordia, después que éste se arrepintió de sus graves pecados (cf. 2 Sam 11?12,13a). Dios mantiene siempre su fidelidad hasta el punto que envía a su propio Hijo para sellar con su pueblo la Nueva y definitiva Alianza.

En los Evangelios abundan los ejemplos en los que Jesús en sus encuentros con los pecadores les anuncia la verdad, remedia sus males, pero siempre con el mandato de no volver a pecar. Así ocurrió con Zaqueo (Lc 19,1-10); con la mujer adúltera (Jn 8,1-11) y la mujer samaritana (Jn 4,5-29).

Observando por ejemplo el Evangelio de Lucas nos damos cuenta que la misericordia de Jesús se expresa en obras concretas. El samaritano muestra su compasión acercándose y vendando las heridas del hombre que había sido agredido por los bandidos. Asume el problema del desdichado haciéndolo suyo, olvidándose de sus propios planes. Distinta fue la actitud del sacerdote y el escriba que, apoyados en sus propias leyes, podían dar múltiples razones para justificar su indiferencia. Esta parábola (Lc 10,30-37) y las que aparecen en Lucas 15, evidencian que la misericordia no deja las cosas como estaban: saca de la miseria y del pecado.

La misericordia no equivale a la aprobación del mal. Como nos recordará san Juan Pablo II: “El significado verdadero y propio de la misericordia en el mundo no consiste únicamente en la mirada, aunque sea la más penetrante y compasiva, dirigida al mal moral, físico o material: la misericordia se manifiesta en su aspecto verdadero y propio, cuando revalida, promueve y extrae el bien de todas las formas de mal existentes en el mundo y en el hombre”[2]. Debemos combatir el mal a fuerza de bien como dice san Pablo (Rm 12,21), pues una cosa es juzgar al pecador y otra rechazar su pecado.

La misericordia no se riñe con las leyes, sino que regenera lo que la justicia no está en condiciones de lograr por sí misma. Es decir que “…la estructura fundamental de la justicia penetra siempre en el campo de la misericordia. Esta, sin embargo, tiene la fuerza de conferir a la justicia un contenido nuevo que se expresa de la manera más sencilla y plena en el perdón”[3].

En la Bula de convocatoria de este año jubilar, el Papa Francisco dice que “Jesucristo es el rostro de la misericordia del Padre”[4], con lo que nos marca el camino y el paradigma para conocer y explicitar los contenidos de la misericordia: Cristo es el camino y sus obras son el contenido y el método de la misericordia.

3. La misericordia en las enseñanzas del Papa Francisco

No podemos referirnos a este tema dejando de lado el pensamiento del Papa Francisco sobre el mismo. Este ha sido, sin lugar a dudas, uno de los temas claves de las enseñanzas del Papa Francisco desde los inicios de su pontificado. El Santo Padre ha aprovechado todos los escenarios para invitar a encarnar esta virtud en los diversos ámbitos de la vida, no limitándose sólo al plano espiritual o pastoral, sino también en el aspecto social, familiar, económico, cultural y político. Su insistencia es que todas las realidades sean iluminadas bajo la luz del rostro misericordioso de Dios.

El Papa Francisco nos invita a todos a vivir bajo el dinamismo de la misericordia: a los sacerdotes en el confesionario y en las más diversas actividades pastorales, a los padres de familia, a los jefes de Estado, a las familias religiosas, a los profesionales, en fin, a todos los hijos de Dios.

La centralidad de la misericordia en el ser y el quehacer de la Iglesia ha sido expresado por él de diferentes maneras. Sus expresiones, en las catequesis de las Audiencias generales semanales, en el rezo del Ángelus dominical, en su Exhortación Apostólica Evangelii gaudium, en sus homilías y en todas sus enseñanzas, nos ponen en perfecta sintonía con la fuerza y la originalidad de su pensamiento sobre la misericordia.

El actual Sucesor de Pedro ha dicho que la misericordia es el bálsamo amoroso de Dios para con los pecadores, los pobres, los amenazados y marginados de la sociedad y nos recuerda que “la misericordia es el corazón de Dios. Por ello debe ser también el corazón de todos los que se reconocen miembros de la única gran familia de sus hijos; un corazón que bate fuerte allí donde la dignidad humana —reflejo del rostro de Dios en sus creaturas— esté en juego. Jesús nos advierte: el amor a los demás […] es la medida con la que Dios juzgará nuestras acciones. De esto depende nuestro destino eterno”[5].

El Papa hace un insistente llamado a los sacerdotes invitándolos a humanizar el sacramento de la reconciliación, por constatar que algunos sacerdotes dejan de lado el mandamiento del amor compasivo y misericordioso de Dios. También ha exhortado repetidamente a los sacerdotes a “ser misericordiosos en el confesionario” indicando que “uno podrá ser un buen hombre o una buena mujer, pero si no sabe perdonar no es cristiano”.

4. Realidades de nuestra sociedad que claman misericordia

Las parábolas del juicio final (cf. Mt 25,31-46) y del “padre misericordioso”[6], (Lc 15, 11-32) son una invitación directa de Jesús a responder, desde el amor, a las situaciones límites que marginan a los seres humanos. En el relato de estas parábolas, Jesús pide dar de comer al hambriento, dar techo a los sin techo, vestir al desnudo, acoger al forastero, visitar a los enfermos y a los presos, perdonar y acoger al hermano que se ha equivocado.

El cristiano no puede estar despistado del horizonte del Evangelio, distraído con los “fuegos artificiales” de la mundanidad. Por eso, nuestro horizonte debe ser el de pensar, vivir y actuar como Jesús, compasivo y misericordioso ante los reclamos de nuestro pueblo.

A. Constataciones

Vemos esperanzados que el nuestro es un pueblo creyente, alegre, generoso, acogedor, solidario, capaz de generar cualquier iniciativa de ayuda solidaria al prójimo, con una estructura humana y espiritual idónea para hacer el bien y vivir la misericordia.

Pero también constatamos que vivimos en un mundo traspasado por la miseria, el dolor, el sufrimiento, la enfermedad, la desatención a los más pobres, la injusticia, donde crece la insensibilidad y aumenta “la amenaza de la globalización de la indiferencia”[7]. Es oportuno recordar que “en el plano individual y comunitario, la indiferencia ante el prójimo, hija de la indiferencia ante Dios, asume el aspecto de inercia y despreocupación, que alimenta el persistir de situaciones de injusticia y grave desequilibrio social, los cuales, a su vez, pueden conducir a conflictos o, en todo caso, generar un clima de insatisfacción que corre el riesgo de terminar, antes o después, en violencia e inseguridad”[8] frente a los hermanos que viven desamparados. Con frecuencia encontramos gestos de inmisericordia en nuestra sociedad dominicana, por ejemplo, personas insensibles con hermanos accidentados, que en vez de socorrerlos, los despojan de todas sus pertenencias. Curiosamente constatamos todavía que estamos interactuando con los mismos tipos de personas excluidas o necesitadas a los que Jesús hizo referencia en la parábola del juicio final.

Percibimos que vivimos en una época fuertemente condicionada por las políticas del mercado, donde todo es medido y valorado según la utilidad y la rentabilidad, también las personas. Estas, en términos de mercado, valen lo que producen y valen en cuanto son útiles. Esta concepción mercantilista privilegia el hacer, la utilidad y la apariencia sobre el ser. El Papa ha hablado de la “cultura del descarte” haciendo alusión a este vergonzoso fenómeno social. Los “descartados, los que no cuentan” esperan algún gesto de misericordia de nosotros los cristianos.

Vemos con preocupación cómo la corrupción priva a la población de recursos económicos que deberían ser destinados para satisfacer sus necesidades básicas: educación, vivienda, alimentación, salud, seguridad, justicia, salarios dignos[9]. Otro gesto de inmisericordia, que va en detrimento del desarrollo, es el cobro de “peajes” a los inversionistas, que en vez de estimulárseles se les ahuyenta. La corrupción crea una escandalosa situación de inequidad y desigualdad social, ensanchando la brecha entre personas que se han hecho ricos como por arte de magia, sin otra justificación que haber pasado por el tren administrativo público y una gran mayoría de personas honestas que apenas logran sobrevivir con el esfuerzo de toda una vida de trabajo.

Lamentablemente la impunidad y la complicidad han sido los mejores aliados de los corruptos en los sistemas políticos en todo el mundo. La impunidad es la mejor manera de incentivar a los corruptos a apropiarse de los bienes del pueblo y al mismo tiempo una manera de mal educar a las nuevas generaciones. Los empobrecidos, víctimas del sistema corrupto, piden misericordia para que le sea devuelto lo que en justicia les pertenece para vivir con dignidad.

El incumplimiento de la ley: estamos en un país donde no faltan las leyes, pero no siempre son respetadas y aplicadas o se aplican a los ciudadanos de una manera muy selectiva. Un país donde a “todo se le quiere buscar la vuelta” con tal de evadir hacer lo correcto. Las víctimas de las injusticias claman por un trato más justo y misericordioso.

Estamos iniciando el 2016, un año de contienda electoral en el que se elegirán a los servidores públicos a nivel Ejecutivo, Legislativo y Municipal, del país. Nos preguntamos qué podría aportar la virtud de la misericordia en este mundo tan particular.

Los candidatos en sus discursos de campaña hablan habitualmente de cercanía, de escuchar los reclamos del pueblo, de tener en cuenta las necesidades de los pobres, ser su “voz” en las entidades públicas que ocupen. Sin embargo, percibimos la devaluación de la credibilidad en el ejercicio de la política. La gente percibe que la política es un negocio de fácil enriquecimiento para unos pocos que logran escalar a puestos dirigenciales en el tren gubernamental, y no un ejercicio de servicio a la sociedad y al bien común. Los engañados por falsas promesas electorales claman misericordia.

La inseguridad ciudadana y criminalidad: es altamente preocupante el alto nivel de violencia que ha ido permeando todas las esferas sociales de nuestro país, desde la familia con los feminicidios, hasta los secuestros y el sicariato; segar la vida de un ser humano por un simple celular, hasta tener que soportar la vergüenza de presenciar la implicación en no pocos hechos delictivos de miembros de las mismas instituciones encargadas de garantizar el orden público y combatir la violencia, así como de la seguridad ciudadana y nacional. Las víctimas de la violencia, de la inseguridad ciudadana y la criminalidad claman misericordia.

Nos preocupa grandemente la violación del sagrado derecho a la vida desde sus inicios. La vida, ese don supremo de Dios, es amenazada desde el mismo seno materno así como también por el creciente clima de violencia. Las vidas indefensas también claman misericordia.

Nuestra madre tierra también clama misericordia ante las despiadadas agresiones sistemáticas de las mineras, la extracción de arena de los ríos y la deforestación de sus orillas, la reducción a cenizas por manos criminales de muchos de nuestros bosques, la tala indiscriminada de árboles en nuestras reservas naturales con fines comerciales, en fin, por la brutal depredación a que está siendo sometida la madre naturaleza en nuestro frágil ecosistema insular[10].

Acogemos el llamado sobre el tema migratorio que nos hiciera el Papa Francisco, en nuestra última visita Ad Límina, a tener una atención pastoral caritativa con todos los inmigrantes –en especial a los de la vecina República de Haití-, así como ayudarles a integrarse en la sociedad y darles nuestra acogida en la comunidad eclesial. También asumimos la exhortación a brindar nuestro apoyo “a las autoridades civiles para alcanzar soluciones solidarias a los problemas de quienes son privados de documentos o se les niega sus derechos básicos”[11].

B. Todo esto nos mueve a la siguiente reflexión:

El panorama que vivimos en la República Dominicana nos abre un horizonte propicio para la práctica de las obras de misericordia. Partiendo de nuestra realidad económica, socio-cultural, política y religiosa, estamos desafiados a dar respuestas a estas realidades desde el principio evangélico de la misericordia al estilo de Jesús de Nazaret.

Da la impresión de que nos hemos inmunizado frente a todos estos males que afectan a nuestra sociedad y al mundo, o que hemos ido perdiendo la capacidad de asombro y de reaccionar acorde con el Evangelio y los más elementales intereses del ser humano.

Estas deshonrosas situaciones nos interpelan y nos llevan a dar una respuesta esperanzadora desde el Evangelio de la misericordia. El Papa Francisco nos recordará que “Jesús nos enseña a ser misericordiosos como el Padre (cf. Lc 6,36). En la parábola del buen samaritano (cf. Lc 10,29-37) denuncia la omisión de ayuda frente a la urgente necesidad de los semejantes: «lo vio y pasó de largo» (cf. Lc 6,31.32). De la misma manera, mediante este ejemplo, invita a sus oyentes, y en particular a sus discípulos, a que aprendan a detenerse ante los sufrimientos de este mundo para aliviarlos, ante las heridas de los demás para curarlas, con los medios que tengan, comenzando por el propio tiempo, a pesar de tantas ocupaciones”[12]. Los gestos y acciones de Jesús misericordioso son el mejor estímulo para ejercitarnos en las obras de misericordia.

Las situaciones antes descritas apelan a nuestra sensibilidad ante el hermano que sufre, ante el “herido a la orilla del camino”, convirtiéndose así en una fuerte invitación de Dios para que respondamos con gestos concretos desde la misericordia y la compasión, testimoniando nuestra fe con gestos más que con hermosos discursos (cf. Santiago 2,14-26).

Nosotros, como Pastores, nos encontramos hoy frente a los grandes desafíos de nuestro tiempo que afectan la vida social y eclesial desde el mismo seno de la familia. Estamos llamados, por lo tanto, a ir no solamente a las periferias geográficas, sino a las periferias existenciales… allí donde está el pecado, el dolor, la enfermedad, el rechazo, la violencia, el engaño y la inequidad que genera división y violencia. Como Iglesia estamos llamados a salir al encuentro de las personas que sufren estas situaciones con una renovada y esperanzadora mirada de misericordia.

Preguntémonos sinceramente ¿Cómo reaccionaría Jesús ante la realidad que vimos hoy en nuestra sociedad? ¿Cómo respondería ante estas situaciones? ¿Cómo manifestar la misericordia de Dios hoy entre nosotros? ¿Cuáles gestos concretos de misericordia realizar?

Los seguidores de Jesús estamos llamados a actuar como si el mismo Cristo compasivo y misericordioso estuviera en nuestro lugar, encontrando en Él la fuente viva de inspiración y la iluminación para responder a las “miserias” del prójimo lo más apegadamente posible al Evangelio. Para ser hombres y mujeres misericordiosos tenemos que dejarnos tocar primero por la misericordia del Padre, experimentando en carne propia lo que significa ser perdonado. Pues, difícilmente entenderemos y valoraremos lo que no sea asumido desde dentro por nosotros, es decir, lo que no haya sido procesado por nuestra experiencia. Es necesario abrirse a la misericordia de Dios entrando en un proceso de conversión personal.

5. Las Obras de misericordia

El Catecismo de la Iglesia Católica se refiere al tema de la misericordia de manera práctica, describiendo las maneras concretas de hacerla realidad en nuestra relación con el otro.

El Catecismo es inspirador y desafiante a la vez, porque busca traducir con gestos concretos y comprensibles (obras de misericordia), este atributo de Dios como una respuesta eficaz a las diversas necesidades humanas, sea en el orden espiritual o en el orden corporal. Nos habla de “las obras de misericordia”, entendiéndolas como “acciones caritativas mediante las cuales ayudamos a nuestro prójimo en sus necesidades corporales y espirituales (cf. Is 58,6-7; Hb 13,3).

A. Obras de misericordia corporales

a) Visitar a los enfermos

Abundan en nuestros hospitales enfermos olvidados por sus familiares, o bien, personas que por la lejanía con el centro hospitalario, no reciben visita alguna. También en nuestros barrios y comunidades pobres, hay muchos enfermos que ni siquiera pueden ir a los hospitales y que sufren doblemente: por un lado, los dolores de sus males físicos y, por otro, la ausencia de alguien que les muestre afecto y les fortalezca en la fe. Es bueno dar dinero para los necesitados, pero qué bueno es también darnos nosotros mismos. Compartamos de nuestro tiempo con ellos y llevémosles una palabra de aliento, un rato de compañía a esos cristos sufrientes.

b) Dar de comer al hambriento

Es un mandato de Jesús compartir con el necesitado, nos lo dice muy claro en el Evangelio: “El que tenga dos túnicas, dé una al que no tiene; y el que tenga qué comer, haga otro tanto “ (Lc 3,11). Ante la actitud insolidaria de los apóstoles, que quieren que despache a la multitud hambrienta, después de escuchar sus enseñanzas, Jesús les manda: “Denles de comer ustedes mismos” (Lc 9,13; cf. Jn 6,1-13). Con esto nos enseña también a nosotros a no ser indiferentes ante las necesidades de los demás. El Papa Benedicto XVI nos recordaba que dar de comer a los hambrientos es un imperativo ético para la Iglesia que responde a las enseñanzas del Señor Jesús[13]. Al compartir nuestro pan, no sólo le quitamos el hambre a nuestro hermano necesitado, sino que le mostramos el amor de Dios.

c) Dar de beber al sediento

Con cuánto gusto nos bebemos un vaso de agua fresca después de recorrer un largo trecho para calmar nuestra sed. Pensemos en muchos hermanos nuestros que se enferman porque tienen que calmar su sed con agua contaminada. Hay también muchas personas en nuestros barrios que tienen que comprarla para su aseo diario mientras muchos la desperdician. El Papa Francisco advertía que “privar a los pobres del acceso al agua significa negar el derecho a la vida fundamentado en su inalienable dignidad”[14].

d) Acoger al forastero

Por la acogida al forastero seremos reconocidos en el momento del juicio final, así como por las demás obras de misericordia (Mt 25,35). Existen muchos inmigrantes que esperan nuestra ayuda para poder vivir dignamente junto a su familia, ayuda que debe hacerse presente en toda forma y en todo momento. Como cristianos debemos mostrar el rostro misericordioso de Jesús, poniendo en práctica el amor cristiano por encima de cualquier otra ley.

e) Vestir al desnudo

Es cierto que hoy día hay abundancia de vestidos, pero no todos tenemos las mismas facilidades de obtenerlos. A menudo nos encontramos con hermanos escasos de vestidos. Ayudémosles y seamos solidarios y démosles la posibilidad de tener vestidura limpia y respetable, que les permita reencontrar al Señor en la bondad de los demás.

f) Visitar a los encarcelados

La carta a los Hebreos nos señala en forma de mandato el cumplimiento de esta obra de misericordia: “Acuérdense de los presos, como si ustedes estuvieran presos con ellos” (Hb 13,3). La Iglesia nos llama a llevarles, no sólo cosas materiales, sino el cariño de toda la comunidad y el aliento de Jesús a cada uno de ellos, para que se sientan parte del rebaño del Único Pastor. Y pueda oírse de nuevo el cumplimiento de la profecía: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado por la unción. Él me envió a llevar la Buena Noticia a los pobres, a anunciar la liberación a los cautivos y la vista a los ciegos, a dar la libertad a los oprimidos y proclamar un año de gracia del Señor” (Lc 4,18-21; cf. Is 61,1s).

g) Enterrar a los muertos

Sepultar a los muertos no significa que los olvidemos, por el contrario, esta obra de misericordia corporal nos lleva a la obra de misericordia espiritual que nos invita a rezar por los vivos y los muertos. Es un acto de misericordia mantener sus sepulturas en buen estado, pues en ellas se contienen los restos mortales de aquellos que fueron templo del Espíritu Santo, y que resucitará al final de los tiempos. Como bien enseña el Catecismo de la Iglesia: “En la muerte, separación del alma y el cuerpo, el cuerpo del hombre cae en la corrupción, mientras que su alma va al encuentro con Dios, en espera de reunirse con su cuerpo glorificado. Dios en su omnipotencia dará definitivamente a nuestros cuerpos la vida incorruptible uniéndolos a nuestras almas, por la virtud de la Resurrección de Jesús”[15].

B. Obras de misericordia espirituales

a) Enseñar al que no sabe

Es un acto de mucha misericordia y solidaridad enseñar a los demás. Pensemos de todo lo que se priva el que no sabe leer y escribir. Con el plan “Quisqueya Aprende Contigo” fueron muchas las personas alfabetizadas. Ojalá se pueda continuar con este proyecto hasta el final. Además, hay que seguir facilitando y ayudando a los ya alfabetizados a que sigan creciendo y desarrollándose en todo tipo de conocimiento y cultura.

b) Dar buen consejo al que lo necesita

Hay muchas personas que comenten graves errores, porque no tienen a alguien de confianza que les ayude a encontrar nuevamente el camino del bien. Para dar un buen consejo es necesario que nosotros mismos hayamos sido aconsejados. Dado que aconsejar es un don del Espíritu, debemos pedírselo a Dios para que con nuestras palabras y nuestras acciones, aconsejemos a los que lo necesitan.

c) Corregir al que yerra

Esta obra de misericordia se inspira en el texto de la corrección fraterna (Cf. Mt 18,15-17). Cuando un hermano nuestro peca o se equivoca, es nuestro deber llamarlo a corrección, pero siempre con caridad. De ese modo, evitamos los comentarios y malos entendidos que tantas veces provocan separación y conflictos en la comunidad.

d) Perdonar al que nos ofende

El acto más sublime del amor es el perdón. Pero ¡Qué difícil es perdonar! En los Evangelios vemos que Jesús enseñó con palabras a sus discípulos la importancia del perdón. La última lección la dio en la cruz, perdonando a sus propios verdugos. En la oración del Padrenuestro nos dice que para que seamos perdonados tenemos que perdonar primero a los que nos ofenden. No esperemos a que los que nos han ofendido vengan a pedirnos el perdón, hagámoslo siempre como nos lo enseña Jesús.

e) Consolar al triste

En el discurso de las Bienaventuranzas Jesús nos dice: “Dichosos los que lloran porque serán consolados” (Mt 5,5). Dios, por medio de su Espíritu Santo, nos consuela. Pero se vale de nosotros para consolar a los demás. Somos consuelo para los tristes, no sólo cuando nos compadecemos, sino también, cuando evitamos ser causa de sus tristezas. Que podamos compartir “los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, son a la vez gozos y esperanzas, tristezas y angustias de los discípulos de Cristo. Nada hay verdaderamente humano que no encuentre eco en su corazón”[16].

f) Sufrir con paciencia los defectos del prójimo

Es fácil ver la paja en el ojo ajeno y difícil ver la viga en el nuestro. La paciencia frente a los defectos de nuestros hermanos nos hace madurar y crecer y puede ser el mejor camino de ayudarles a su superación. Quien reconoce sus defectos y limitaciones puede ser más fácilmente tolerante con los demás.

6. CONCLUSIÓN

Como pastores, expresamos nuestra preocupación y nuestro apoyo a los hermanos más necesitados de nuestras comunidades cristianas, sintiéndonos muy cercanos a sus reclamos.

Estamos muy de acuerdo con san Ireneo de Lyon cuando afirma: “La gloria de Dios es que el hombre viva” y, agregamos, que viva con la dignidad que otorga el amor misericordioso de Dios.

Nos parece oportuno y edificante recordar que “la Iglesia proclama la verdad de la misericordia de Dios, revelada en Cristo crucificado y resucitado, y la profesa de varios modos. Además, trata de practicar la misericordia para con los hombres a través de los hombres, viendo en ello una condición indispensable de la solicitud por un mundo mejor y « más humano », hoy y mañana. Sin embargo, en ningún momento y en ningún período histórico —especialmente en una época tan crítica como la nuestra—la Iglesia puede olvidar la oración que es un grito a la misericordia de Dios ante las múltiples formas de mal que pesan sobre la humanidad y la amenazan. Precisamente éste es el fundamental derecho-deber de la Iglesia en Jesucristo: es el derecho-deber de la Iglesia para con Dios y para con los hombres”[17].

Nos dice también el san Juan Pablo II: “La auténtica misericordia es por decirlo así la fuente más profunda de la justicia. […] La misericordia auténticamente cristiana es también, en cierto sentido, la más perfecta encarnación de la «igualdad» entre los hombres y por consiguiente también la encarnación más perfecta de la justicia, en cuanto también ésta, dentro de su ámbito, mira al mismo resultado”[18].

Nuestro deseo, en consonancia con el Papa Francisco, es que “la Iglesia se convierta en el eco de la Palabra de Dios que resuena fuerte y decidida como Palabra y gesto de perdón, de soporte, de ayuda, de amor: Que nunca se canse de ofrecer misericordia y será siempre paciente en el confortar y perdonar[19].

Con el Papa, invitamos a todo el pueblo de Dios a ejercitarse en la sagrada práctica de la misericordia, cada cual desde el lugar y la situación que le está tocando vivir. Que nadie se sienta excluido de esta responsabilidad. El llamado es para todos sin excepción. El ejercicio es una tarea de todos que hace mucho bien a los hermanos.

Por último, con san Juan Pablo II “supliquemos por intercesión de Aquella que no cesa de proclamar «la misericordia de generación en generación», y también de aquellos en quienes se han cumplido hasta el final las palabras del sermón de la montaña: «Bienaventurados los misericordiosos porque ellos alcanzarán misericordia»”[20] .

Que nuestra Señora de La Altagracia, Madre de Misericordia, proteja al pueblo dominicano y le conduzca por los caminos de su Hijo, rostro misericordioso del Padre. Y que Dios Padre misericordioso nos conceda la gracia de soportarnos mutuamente, perdonarnos y de ser misericordiosos como nuestro Padre-Dios es misericordioso (cf. Lc 6, 36).

¡Dios les guarde y bendiga a todos!


Conferencia del Espicopado

Muere Hamlet Hermann


A los 81 años
Este martes 19 de enero falleció de un infarto al corazón el exguerrillero Hamlet Hermann.
Ingeniero de profesión, había nacido el 5 de octubre de 1934.
Fue el primer director de la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMET), en el primer gobierno de Leonel Fernández.

- Compañero de guerrilla de Francisco Alberto Caamaño Deñó, a quien vio morir en su aventura.

- Estuvo casado con Socorro Castellanos.

- Se distinguió como escritor, articulista y columnista de varios diarios dominicanos.

- Fue catedrático en la UASD durante veinte años.


Este blog expresa sus más sentidas condolencias a sus deudos.


DLRD
Foto: Acento

Encuesta SIN-Mark Penn: Marino Zapete estaba en lo cierto


El viaje a Panamá
Marino Zapete continúa siendo uno de los periodistas más creíbles de la República Dominicana.
Los resultados del viaje a Panamá de varios periodistas que se suponían creíbles junto al Presidente a lamerle usted sabe el qué al jefe del Cuarto de Guerra Mediática de la cleptocracia gobernante están dando resultados. Esta es la encuesta de Alicia Ortega y de Fernando Hasbún, su esposo.

La suerte es que ya sabemos lo que hay, y de credibilidad ...nananina.

¡E' pa' fuera que van!



Luis Del Monte / Desde La República Dominicana

Gobierno roba a dominicanos en energía eléctrica y combustibles


Descaradamente
El domingo pasado el megamultimillonario (según su declaración jurada de bienes) ministro de Industria y Comercio aseguró que aunque algún país nos regalara la gasolina, el galón de gasolina costaría 99 pesos. Esto, según el cleptócrata peledeístas, porque las leyes con impuestos que tienen los combustibles son para pagar la deuda externa. Lo que no dijo el megamultimillonario (según su declaración jurada de bienes), es que esa maldita deuda externa se la han robado su partido y asociados. Nosotros, el pueblo, pagamos los robos de la cleptocracia gobernante.

Hoy, el superintendente de electricidad, Eduardo Quincoces Batista, aseguró que el pueblo dominicano debe olvidarse por el momento de que esa institución aplicará rebajas en la tarifa para los clientes.


Este es un gobierno, al igual que los de Leonel Fernández, de ladrones, ladrones descarados.

La suerte es que para el 15 de mayo, día de las elecciones, faltan poco menos de cuatro meses, para sacar a estos sinvergüenzas del poder y meterlos presos a todos.



Juan Santos / Desde La República Dominicana

Un sinvergüenza amoral, eso es lo que es


Danilo Medina: ¿loco o sinvergüenza?
VIDEO
Hace unas semanas le inquirí a un funcionario palaciego sobre la apreciación que el presidente tenía de su propia gestión. Creí que me iba a hablar de inconformidades, decepciones y contrariedades, pero su respuesta me dejó fríamente aturdido. En tono sobrio me dijo: “El presidente está convencido de que hace el mejor gobierno del mundo”. “¡Danilo está loco!”, fue el grito mudo que como un eructo salió de mis adentros.

Me sentí más turbado de lo que esperaba. Advertí que el presidente entraba prematuramente al umbral de un trance delirante, esa propensión obsesiva que quiebra la conexión del que la padece con la realidad, creyendo como inequívocas percepciones falsas, engañosas o irracionales. A partir de esa plática empecé a explorar agudamente las contadas declaraciones del presidente para determinar si definían un patrón patológico consistente. Tuve suerte, porque, por razones muy circunstanciales, Medina, de tímida comunicación, ofreció, en los últimos días, juicios parcos pero reveladores de su febrilidad. El más desquiciado fue decir que “su gobierno ha sido el más honesto de la historia”. Este inaudito desvarío fue tan extravagante y bochornoso que tuvo que ser arreglado en versiones distintas por tres funcionarios del Gobierno.

Para nuestra desgracia, el presidente no está loco; su valoración nace de la amoralidad y no de la insanidad mental, condición que al menos lo inhabilitaría. Más que loco, el presidente es un sinvergüenza. Y para los que piensan demandarme o acosarme por esta opinión (que agradecería inmensamente), les anticipo en cuál acepción aplico contextualmente el término que invoco. Según el Diccionario de la lengua española, sinvergüenza es, entre otros significados: “el que obra o habla sin comedimiento o respeto y con descaro”. El presidente ha hablado y obrado de forma metódicamente descarada, tanto que no ha tenido consideración ni de su propio compromiso personal cuando repetidamente prometió no reelegirse, sin embargo, de manera alevosa y taimada, fraguó una reforma constitucional de microondas para hacerlo. Esa sola actuación comporta la suficiente autoridad para definir y revelar una condición moral enfermiza. Asentir, hasta por omisión, la burla de Medina es aceptar infamemente una bofetada. No todos somos borregos ni andamos en manadas; algunos todavía pensamos como ciudadanos y en tal condición reclamamos el respeto que al presidente parece faltarle.


En su delirante confesión de honestidad, Medina alude a “su” gobierno como si fuera una Administración nueva, obviando que en su mayoría sus funcionarios son una logia de vejestorios con lastres, mañas y manías hartas conocidas. Este gobierno no le ha hecho ni cosquillas a la cultura burocrática del PLD, basada en la autonomía autocrática de sus cuadros y operada a través de núcleos de autoridad cerrados como los feudos medievales. Los ministerios han devenido en pequeños gobiernos donde la voluntad del funcionario perdió límites, controles y reparos. En ese esquema, la inamovilidad es regla, por eso no es casual que sus dirigentes/funcionarios hayan echado canas en sus haciendas y fomentando fortunas obscenas.

¿Cuál ha sido la gran reforma ética del gobierno de Medina? ¿Dónde están las políticas y acciones públicas trascendentes de persecución a la corrupción? El caso del senador Félix Bautista, vendido como el esfuerzo emblemático de esa intención, resultó ser el sainete más chusco; una urdimbre política delineada bajo un pacto de impunidad entre las facciones del PLD. Claro, el perverso designio era imputarle “genéricamente” al sistema judicial su incapacidad para procesar y juzgar la corrupción, cuando se dejó, a sabiendas, en manos de los jueces políticos el voto decisorio a favor del senador. Tan inocultable era la trama del Gobierno, que el procurador renunció de forma insólita a su obligación pública de recurrir la decisión que ratificó el auto de "no ha lugar"Supre en beneficio del secretario de organización de su partido.

Como forma de limpiar al Gobierno del estigma, el mismo procurador que dijo no creer en la Suprema Corte de Justicia por su parcialidad entra en un romance idílico con su presidente para de “manitas agarradas” lanzar una épica cruzada de “moralización” de la Justicia con investigaciones sumarias a jueces penales que presuntamente aceptaron sobornos. La atrocidad era patética: trasmitir la impresión de que la corrupción estaba en la Justicia y no en el Gobierno; que el Ministerio Público era una víctima más de la descomposición sistémica del Poder Judicial y con ello sepultar el caso Bautista. No señor, la perversión del sistema nació y se agudiza con los pactos políticos; en la Justicia queda todavía mucha dignidad que merece respeto. Aquí hasta el más ingenuo sabe la inteligencia oscura que desde el poder movió las fichas en la judicatura “politizada” para garantizar la impunidad a los exfuncionarios procesados.

Ahora me pregunto: ¿Dónde están los arquitectos de la mafia política que pervirtió a la Justicia? ¿Por qué no se han tocado los altos responsables que crearon esa estructura de corrosión? ¿Por qué en las investigaciones no se interrogó al pasado procurador? ¿Quiénes fueron los que sobornaron a los jueces? Parece que todo terminará con la expiación de los dos jueces procesados mientras los grandes estupradores del sistema celebran impunes sus desafueros. La misma suerte del caso de la OISOE: medidas de coerción para los funcionaritos, ¿y Pimentel Kareh? Bien, gracias, pregúntenle al Presidente. Todo esto sin contar con el rosario de algo más de doscientas denuncias desatendidas, diluidas o abandonadas que pende sobre la honesta administración de Medina.

El presidente Medina, que llegó al poder bajo la sombra de un pacto de impunidad, habla de forma abstracta de la transparencia de su gobierno sobre todo en las contrataciones públicas, como lo revela el “contrato contrabando” de una de sus obras icónicas: la planta de carbón, salpicada de brumas y sospechas. Se refiere también a la red de veedurías, una entelequia más simbólica que funcional cuya mirada solo alcanza la epidermis de los musculosos negocios que se arman en los sótanos del poder. También el presidente del “gobierno más honesto de la historia” exhibe, como uno de sus logros luminosos, la apertura de las licitaciones a través de los sorteos de obras, siendo justamente este sistema el que prohijó la mafia de pagos y extorsiones a los pequeños contratistas, esa misma organización criminal que llevó al arquitecto David Rodríguez García a cegar su vida en un baño de la OISOE.

Si dentro de los parámetros éticos del presidente su administración es un modelo de honestidad, entonces ¿qué nos faltará por ver o padecer? La ruina de Roma imperial será un cuento infantil ¡Sinvergüenzas!


José Luis Taveras
Acento

lunes, 18 de enero de 2016

Así no, Daniló


Danilo y María Gargajo
Mientras la sociedad dominicana debatía sobre la pertinencia o no de dos plantas a carbón en Punta Catalina, Baní, el presidente de la República autorizaba subrepticiamente la firma de un contrato por 2,000 millones de dólares para la instalación allí de otra termoeléctrica con capacidad para generar 600 megavatios/hora.

El proyecto, que luego fue descartado por ser técnicamente inviable, implicaba conceder a Canadá los derechos para la instalación de la referida planta a cambio del compromiso estatal de comprarle toda la energía allí producida.
Los defensores del gobierno alegan que no hubo falla alguna porque no se llegó a materializar el asunto.

Lo dicen sin ningún tapujo, aunque saben que si se descubre que varias personas se han convertido en asociación de malhechores para matar a alguien o asaltar un banco, y luego, por cualquier razón no llegan a cometer el delito, esas personas pueden ser procesadas y condenadas, pues la ley también sanciona la tentativa de delinquir.

Desafortunadamente para el Gobierno, este nuevo escándalo se produce justo en el momento en que el presidente Medina proclamaba quizás la más infausta de sus frases: “mis manos están limpias”.

Danilo se me pareció al niño que se comió el helado a escondida y al ser sorprendido con las manos sucias y la cara embarrada exclama: “No fui yo”, con la infantil esperanza de que su madre le crea.

Para atenuar los efectos de ese falsete, Marchena y Peralta, haciendo las veces de barítonos, se han sumado al coro con un estribillo: “el actual es el gobierno más honesto de la historia” (a excepción del de Juan Bosch (1963).

Para decir esto, sin haber hecho nada frente a casos como el de la OISOE -que ahora sigue con más fe-, el Darío Contreras y demás escándalos de corrupción, tanto del gobierno pasado como de la actual gestión, hay que ser “valiente”. Ni hablar de la muy cuestionable modificación a la Constitución impuesta a billetazos “limpios”.
No importa lo que se diga, aquí no hay ni un solo preso por corrupción, salvo cuatro chivos expiatorios.

La actitud del Presidente y algunos funcionarios recuerdan aquel personaje de la cultura popular dominicana llamado María Gargajo, aquella mujer “tan escrupulosa y exigente con la limpieza que en forma obsesiva se bañaba todo el cuerpo y lavaba la cáscara de los huevos antes de freírlos, pero probaba si la sartén estaba caliente o no con un salivazo”.

Nuestra sociedad demanda transparencia en todas las acciones del Gobierno, mucho más si se trata un megacontrato de 2,000 millones de dólares, que se autorizó -aunque no ejecutó- en la clandestinidad.

Nadie puede esperar que haya confianza entre las partes para sentarse en la mesa a discutir el tan necesario pacto eléctrico, cuando se acaba de descubrir que uno de los jugadores (en este caso el Gobierno) tenía una carta escondida bajo la manga. Así no, no “mesié”.


German Marte
El Día

El Condue y el padre Johnny

     Padre Johnny, acusado de múltiples violaciones sexuales.

¡VAYA PERLA!
“Los cristianos somos auténticos defensores de la vida, de la familia, los valores de la fe y la soberanía. Somos enemigos de la impunidad, de la corrupción y el narcotráfico”, reverendo Fidel Lorenzo Merán, presidente del Consejo Dominicano de Unidad Evangélica (Codue).

Estas son las "Perlas" de Diario Libre de hoy.
Parece que los evangélicos desconocen que el padre Johnny es cristiano.
Este cura católico está acusado de ser un violador sexual en serie y la justicia corrupta de la República Dominicana le archivó sus expedientes.


Que vaya el reverendo Fidel Lorenzo Merán a pastorear a los padres y familiares de las víctimas del aberrado padre Johnny para que escuche las respuestas que obtendrá.

¡Justicia para las víctimas del maniático sexual padre Johnny!

Jeannelle Koss / Desde La República Dominicana

Que se preparen!


Empresario rechaza candidatura vicepresidencial del PLD
Les quedan 7 meses para seguir haciendo lo que les da las gana a los miembros de la cleptocracia gobernante.

Empezando por Leonel Fernández y terminando con Danilo Medina, todos tendrán que rendir cuentas sobre sus actuaciones y aquellos que han cometido delito van para los tribunales de justicia. Senadores, diputados, alcaldes, ministros, directores generales, administradores, vicepresidentes de empresas públicas, gobernadores, jueces de la altas cortes y todo el que haya manejado fondos públicos desde 2004 hasta 2016 están enlistados y serán investigados exhaustivamente.

No habrá escape, órdenes superiores, grupos poderosos condicionaron su apoyo a la ejecución de una lección ejemplar y sin precedentes para los comesolos y sus asociados, con apoyo externo.

Que se preparen, no habrá concesiones ni privilegios. RD será tomada como ejemplo en El Caribe y América Latina.

¿Que quién me lo dijo? - El mismo que me aseguró hoy que el empresario al cual Danilo Medina le ofreció la candidatura vicepresidencial se la rechazó, y no porque su familia se lo pidiera, sino porque lo que viene es en grande en materia de justicia y pasar cuentas a los comesolos.


Seguimos dando orejas.



Luis Del Monte / Desde La República Dominicana


sábado, 16 de enero de 2016

Roberto Rosario dilapida los recursos de los dominicanos


Promocionándose con dinero de los contribuyentes
¡Insólito! En su afán por destacarse el presidente de la Junta Central Electoral (JCE), doctor Roberto Rosario Márquez, ha editado un suelto denominado El Demócrata, en donde en páginas a todo color y en papel satinado, se destacan “logros” que él piensa que lo favorecen en su pretensiones personales. Las publicaciones de marra las hizo en varios medios, pero ¡Oh! sorpresa, la edición de lujo que consta de 12 páginas las hizo en el Listín Diario. ¿Por qué sería?

El primer gazapo “Latinobarómetro de las Américas dice: JCE INSTITUCIÓN PÚBLICA MÁS CONFIABLE EN RD”. Al parecer, el Gobierno Central es menos confiable que la JCE, esto así parece y se deduce si no nos equivocamos al leer este titular de primera plana. Pero además, se da el bombo que de la JCE se afirma que “diversos medios de comunicación del país y del Continente han destacado un estudio realizado por “Latinobarómetro 2015 en el que la Junta Central Electoral de República Dominicana recibe puntuaciones que la colocan como una de las instituciones que gozan de mayor credibilidad en América incluyendo siendo la institución pública mejor posicionada en nuestro país. Pág. 5, 6 y 7”.

¿Cuánto habrá costado al país esta cuestionada afirmación? Sabemos que los periódicos no obedecen al legado del Padre Billini, ni de las Hermanitas de la Caridad.

Ahora bien, en este panfleto, se destacan “éxitos” que solo una mente febril como la de su Presidente se le ocurre exhibir. Ej. “Coro de la JCE ofrece concierto navideño a personal de la Institución”, agregándole: Los presentes disfrutaron preciosa selección a base de temas de la época. Y nos preguntamos: ¿Cuál relevancia tiene esta información interna que solo interesa a los empleados y miembros directivos de la JCE?

En la página 5, será esto noticia: “Distinguen a la JCE por elecciones limpias y transparentes”. Nos preguntamos también si este titular se aplicaría si las elecciones no hubiesen sido limpias y transparentes. Al parecer, esta afirmación nos recuerda “lqqd”, lo que queríamos demostrar.

No dudamos de la autenticidad de los cuadros sobre las “elecciones más limpias y transparentes en América Latina”, en los que se destaca que la JCE con referencia a los países es el 5to. en Confianza en institución electoral y 6to. en Limpias y muy Limpias.

Pero donde aparecen visos de payola es bajo este titular: “JCE comparte con periodistas tiempos de Navidad y Año Nuevo”. Entonces, ¿Cuál de los periodistas invitados a este ágape se atreverá a publicar una noticia contra esta “limpia y honesta” institución?

Lo que no aparece en El Demócrata es la cantidad de canastas navideñas, algunas dependiendo la importancia del receptor llegan a más de 75,000 pesos, conteniendo champan, escoceses de 12 años y las más finas y costosas golosinas. Se estima en varios millones de pesos sin control y sin presupuesto. Ahí se anota una pata el Presidente de la Junta.

La pregunta del millón: ¿Cuánto dinero le costó a los contribuyentes todas estas galanterías? Debemos recordar, que el Presidente de la JCE se queja siempre que los fondos no alcanzan y chantajea diciendo que las elecciones se van a desarrollar de manera precaria y hasta dudosas, sino aparecen los recursos adicionales para los comicios.

No dudamos de que hay jueces probos, pero el Presidente se atribuye el poder de expresarse por el conjunto de la JCE. Sería bueno, que la Cámara de Cuentas audite este “limpia y transparente” organismo para que los contribuyentes, que fueron los que pagaron estas regalías, se den cuenta cuánta fanfarria se hace con sus cuartos para la promoción de un egocéntrico.


José Antonio Martínez Rojas
Hoy

Cleptocracia gobernante adquiere un peso pesado


Otro periodista comprado con el dinero del Estado
Lo escuchamos ayer de sus propios labios y no podíamos creerlo: "Los políticos se pierden en nimiedades, esa tercera planta a carbón fue desechada antes de que se aprobaran las dos que están en proceso, no entiendo por qué hacen escándalos y pierden su tiempo en tonterías". No son las palabras exactas utilizadas,  pero fue más o menos lo expresado.

El "prestigioso" comunicador considera que violar el Pacto Eléctrico, obviar al Congreso y no ser transparente en el gasto y compromiso de los fondos estatales es una tontería. Hace dos meses no pensaba así.

Hoy leímos al jefe del Cuarto de Guerra Mediática de la cleptocracia gobernante alabándolo, el hombre fue comprado a papeletazo$ límpio$, no hay dudas. La reelección del corruptor de turno le doblegó el brazo y el cerebro a base de papeleta$ grande$.

Como a otros admirados jamás lo ofenderíamos ni agrederíamos ni con el pétalo de una rosa, eso sí, su propaganda oficialista aquí no se reproducirá, las de interés para las mayorías sí.

Con el tiempo hemos aprendido a respetar las opiniones de otros, sus necesidades económicas y las ofertas tentadoras difíciles de rechazar, esta, parece que era irrechazable.



Desde La República Dominicana