Y al Gobierno
La Iglesia Católica encabezada por el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, mantiene un desafío a la mujer dominicana y enfrenta ferozmente al gobierno que encabeza el presidente Danilo Medina, abogando por la penalización por ley de todas las formas de aborto.
Hoy más que nunca los dominicanos debemos estar conscientes de que el concordato debe finalizar entre el Estado dominicano y el Vaticano: tiene necesariamente que llegar a su fin, es inaceptable la postura de una iglesia que no representa a la mayoría de los dominicanos el querer imponerse a las malas sobre el sentir más de más de diez millones de habitantes.
Congresistas allegados a López Rodríguez y al grupo de poder que maneja el Estado desde 2004 politizan en los medios de comunicación el tema del aborto sin tomar en cuenta que se trata de la vida, la moral y la salud de las mujeres dominicanas lo que se está colocando de por medio. De la misma manera que los católicos amenazan tomar represalias en las elecciones contra los postulantes a cargos electivos, así debemos los dominicanos tomar nota de quiénes apoyan a los ensotanados retrógados.
En el día de ayer el Cardenal estuvo cabildeando con los diputados perredeístas Víctor Gómez Casanova, Ruddy González, Carlos Gabriel García, Aquiles Ledesma y Graciela Fermín; de la Fuerza Nacional Progresista, Vinicio Castillo Semán; del Partido Reformista Social Cristiano, Ramón Rogelio Genao, y del Partido de la Liberación Dominicana, Francisco Bautista, Henry Merán, Isabel de la Cruz y Teodoro Ursino Reyes. Igualmente los senadores Reinaldo Pared Pérez y Amílcar Romero.
El desafío está hecho, las mujeres y el Gobierno deberían enfrentarlos decididamente.
Luis Del Monte / Desde La República Dominicana
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