Familia indefensa
A sabiendas de que en esta anárquica selva no hay autoridad que haga prevalecer los derechos del ciudadano ordinario, directivos de ese cártel responden a una débil ministra de Educación, que pidió no incrementar las tarifas por encima de un 10 por ciento, que hace tiempo la mayoría de los colegios elevaron hasta en un 30 por ciento el costo de matriculación y mensualidad.
Además de burlarse de las autoridades, de pronunciarse de manera arrogante, al punto de advertir que esos centros educativos deben operar como negocios, los voceros de esa asociación anuncian que se arrogan derecho para retener documentos de orden público como los relativos a la escolaridad de un menor, cuyo tutor principal, según la ley y la jurisprudencia es el fiscal.
Los propietarios de esos colegios deberían saber que el Código de procedimiento Civil establece un protocolo procesal en relación al cobro de deuda por servicio realizado y no pagado, que no incluye secuestrar documentos ni proferir amenazas con lesionar el crédito del deudor.
Peor, aun la mayoría de esos centros educativos privados obligan a padres y tutores a pagar por adelantado el año completo de escolaridad, incluido los tres meses de vacaciones, lo que sí constituye una violación al principio de que nadie está obligado a pagar por un servicio no realizado.
En vez de hablar de excelencia de la educación, de mejoras en los programas educativos, de novedades extracurriculares, sin negarle derecho a justa rentabilidad, los dueños de colegios han preferido ensenar sus enaguas y confundir un sacerdocio con una casa de empeño.
Duele decirlo, pero las familias objeto de tan incalificables abusos, no tienen dónde acudir para reclamar derecho o siquiera amparo ante los desafueros de gente que se atreve a proclamar en público que los colegios privados es ante todo un negocio, sin detenerse a reparar que primero deberían ser centros donde niños y adolescentes se forjen como el acero.
Por enésima vez se reclama a la ministra de Educación, profesora Josefina Pimentel, al Consejo Nacional de Educación o a quien sea, que impida que la mentada Federación de colegios privados incurra en ilegalidades contra una población indefensa y huérfana.
Editorial El Nacional
http://elnacional.com.do/editorial/2011/6/29/87497/Familia-indefensa
No hay comentarios:
Publicar un comentario